El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, avaló ayer en Barcelona la presentación de una propuesta de diálogo y consulta formulada por los comuns a las puertas de las elecciones. Iglesias, junto a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el cabeza de lista de los comuns a las generales, Jaume Asens, apoyó un planteamiento genérico a favor de una doble mesa de diálogo, en el Parlament y el Congreso cuyo acuerdo se someta «a votación de la ciudadanía catalana en las urnas», según ha explicado Asens.

Iglesias afirmó que si bien la propuesta de Podemos y los comuns sigue siendo la del referéndum -según el modelo canadiense, sostiene Asens- se ha abierto a la posibilidad de que el resultado final de la mesa de diálogo no sea necesariamente una votación sobre la independencia: «Nuestra propuesta sigue siendo la misma, defendemos que haya una consulta en Cataluña, y para buscar el acuerdo con otras formaciones nadie puede planetar líneas rojas», señaló. «Estamos dispuestos a escuchar otras propuestas, en el corto plazo los mecanismos que nos van a permitir avanzar van a implicar que todos estemos dispuestos a ceder en algo».

Iglesias afirmó que «la autonomía catalana y la Generalitat son patrimonio de la democracia, y el blindaje del autogobierno y de las instituciones que se han convertido en referencia pedagógica como la escuela catalana, nos parece fundamental». «Hay que hacer un llamamiento responsable a la superación de dos fracasos: el del 155 como amenaza permanente y el fracaso de la unilateralidad», advirtió.

DOS FASES / Asens explicó que la primera fase de la propuesta consistiría en una mesa de negociación que aborde el blindaje del autogobierno de Cataluña en cuestiones como la escuela catalana, la inmersión lingüística, el modelo audiovisual catalán y los Mossos d’Esquadra. El diálogo debería abordar también las inversiones del Estado en Cataluña y la revisión del sistema de financiación autonómico.

Iglesias evitó opinar ayer sobre si Catalunya en Comú-Podem ha de votar parcial o totalmente a favor de la resolución de JxCat, ERC y la CUP que reitera el derecho a la autodeterminación y la reprovación de la Monarquía. Iglesias atribuyó el texto a tensiones internas en el independentismo.