Unidas Podemos y el PSOE han marcado este martes nuevas distancias, en esta ocasión en materia de orden público, al votar en sentido opuesto una iniciativa de la CUP con la que pretendía la derogación de la conocida como ley mordaza y del delito de sedición del Código Penal.
Tanto la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana como la revisión de los delitos de sedición y rebelión están en la agenda del Ejecutivo, pero hoy la CUP ha promovido un debate en el que varios de los apoyos del Gobierno, como ERC o EH Bildu, han criticado con dureza la actitud del PSOE hacia los derechos fundamentales y la han acusado de permitir comportamientos represivos.
En otro tono, el diputado de En Comú Podem Jaume Asens ha recordado que esta misma semana el Consejo de Europa y la Comision de Venecia de esa misma institución han pedido cambios en el Código Penal en los delitos afectados por la libertad de expresión y también en la ley mordaza.
Asens ha apuntado que la pandemia ha cambiado la agenda política, pero es momento de que las fuerzas progresistas se pongan de acuerdo para reformar un Código Penal con delitos obsoletos como el de sedición o el de injurias a la Corona.
"Hemos empezado a hacerlo", ha dicho antes de recordar que en la comisión de Interior se debate la "demolición" de la ley mordaza, que se ha derogado el delito que perseguía a los piquetes y que su partido ha presentado una ley para "evitar que ningún rapero esté en la cárcel".
En cualquier caso, Unidas Podemos ha confirmado su apoyo a la toma en consideración de esta ley, que no será tramitada por el rechazo mayoritario de los grupos, entre ellos el PSOE, el PP, Vox o Ciudadanos.
La diputada socialista Ana Botella la ha descalificado considerándola una "ocurrencia, incalificable", en la que se "manosean principios como libertad, derechos humanos o seguridad" y ha recordado a que su partido no le gusta la ley mordaza y como tal está actuando para cambiarla, pero no puede derogarla sin una alternativa porque sería apoyar "la ley de la selva".
"A los españoles nos ha costado muy cara la seguridad y la democracia en este país como para jugar a la tibieza, a la frivolidad y a los equívocos", ha advertido.
Se trata de la segunda ocasión en el mismo día en el que los socios de gobierno han votado en sentidos opuestos, dado que esta misma mañana el PSOE lo ha hecho con PP y Vox en la Mesa del Congreso para impedir el debate de la proposición de ley que pide la amnistía para todos los encausados por el "procés" en Cataluña desde 2013, un texto que Unidas Podemos sí quería tramitar.
