Seis días después de que la Audiencia revocase el depósito cautelar de los bienes muebles del pazo de Meirás, los nietos del dictador Francisco Franco han presentado el escrito para solicitar al juzgado autorización para retirar el mobiliario, obras de arte y enseres depositados en el inmueble. Los abogados Luis Felipe Utrera-Molina y Antonio Gil solicitan que se les conceda a sus representados el "plazo razonable de un mes" para retirar "todas las cosas, bienes u objetos que hay en el interior del inmueble reivindicado", salvo aquellas que hayan sido depositadas por el Estado tras tomar posesión de forma provisional del pazo. Los letrados avanzan ya la intención de la familia Franco de reclamar una indemnización por los daños y perjuicios ocasionados por esta orden cautelar, un resarcimiento que ha sido avalado por los jueces.

Los Franco piden también la eliminación del inventario de bienes solicitado por el juzgado de instancia al amparo de unas medidas que, inciden, fueron revocadas. Reclaman además que se ordene al Estado y las partes demandantes (XuntaDiputación y ayuntamientos de Sada y A Coruña) "que se abstengan con carácter indefindio de todo uso, utilización, invocación, divulgación y o revelación" tanto del inventario realizado por los técnicos de la Consellería de Cultura como del informe de Patrimonio Nacional sobre la titularidad de los bienes depositados en Meirás.

El Gobierno, que avanzó la pasada semana que analizaba las fórmulas para evitar el "expolio", todavía no ha desvelado qué medidas prevé adoptar. El Concello de Sada ha propuesto a la Abogacía del Estado que presente un incidente de ejecución de sentencia para que la Justicia aclare qué bienes pueden retirarse del pazo. El Ayuntamiento sadense recuerda que la escritura de venta del pazo de 1938 recoge textualmente que el inmueble se vendió con "con todo cuanto dentro del edificio existe", salvo unos tapices y la biblioteca de Emilia Pardo Bazán, que su heredera "ofreció darla gratuitamente al Generalísimo". En base a esta escritura, el Ayuntamiento defiende que los Franco no pueden retirar ningún bien de la condesa de Pardo Bazán (la biblioteca es un Bien de Interés Cultural, por lo que su traslado precisaría de permiso autonómico).

El Concello sadense, entidades memorialistas como Iniciativa Galega pola Memoria, y el BNG han reclamado además a la Xunta que modifique de inmediato el decreto de declaración de Bien de Interés Cultural del pazo de Meirás para incluir un anexo con los bienes vinculados a este sitio histórico. Consideran que es el único modo de blindar, al menos a corto plazo, el mobiliario y las obras de arte.

Como ya informó este diario, la Audiencia revocó la medida cautelar dictada por la jueza de primera instancia al enteder que no procedía impedir la retirada de unos bienes muebles que el Estado no reivindicaba en su demanda, que se limitó al inmueble y las fincas. En su auto, firme, los jueces abrían la puerta al Estado a presentar una demanda para reclamar el mobiliario y obras de arte depositadas en el pazo si consideraba que eran de su propiedad.