Las peticiones de asilo en la frontera de Ceuta por parte de marroquíes que entraron ilegalmente en la ciudad los días 17 y 18 de mayo se han incrementado en las últimas horas hasta superar la presencia en la zona de más de 300 personas.

Según han explicado a Efe fuentes policiales, estos marroquíes forman parte del grupo de personas que entró ilegalmente en la ciudad y se encontraban viviendo a la intemperie ante su negativa a volver a Marruecos.

Desde primeras horas de la mañana de este martes al menos se ha registrado la presencia de unas 300 personas, entre ellas varias mujeres, que han demandado esta protección. Los inmigrantes marroquíes están presentando esta solicitud, tras lo cual abandonan la frontera a la espera de volver acudir a la cita para estudiar su situación.

Estos marroquíes forman parte del grupo de personas que se han negado a volver de forma voluntaria a su país y que suelen dormir bien en casas particulares o en los montes de la ciudad.