La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha defendido este miércoles que la postura de España con respecto al Sáhara Occidental no ha cambiado con la llegada del Gobierno de coalición y no lo hará en un futuro, al tiempo que ha apostado por "mirar al futuro" ante la crisis abierta con Marruecos que el Ejecutivo no deseaba.

"La posición de España con respecto al Sáhara es una política de Estado, por eso es constante, no la ha cambiado este Gobierno y francamente no la va a cambiar porque está anclada en principios irrenunciables como son la defensa del multilateralismo y el respeto de la legalidad internacional, ambos pilares de la acción exterior", ha afirmado rotunda ante el Pleno del Congreso de los Diputados, en respuesta a la pregunta formulada por el diputado de EH Bildu Jon Iñarritu.

La ministra ha recordado que en marzo un total de ocho grupos parlamentarios, entre los que también estaba el PP, aprobó en el Senado una resolución en la se pedía al Gobierno que "apoye y facilite activamente en la ONU, en la UE y en el resto de organizaciones internacionales una solución política conforme al Derecho Internacional y a las resoluciones de la ONU".

"La postura de España no difiere en nada de lo que dicen las resoluciones de Naciones Unidas", ha insistido González Laya, descartando implícitamente con ello el reconocimiento de la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental, como hizo Estados Unidos el pasado diciembre con Donald Trump aún como presidente y como estaría presionando Rabat para que ocurriera.

Además, ha recordado que se han venido apoyando los esfuerzos del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para la búsqueda de una solución al conflicto conforme a lo estipulado en dichas resoluciones.

"Esta es la posición que apoya España, esta es la que ha sido y esta es la que va a ser", ha zanjado la ministra, después de que Iñarritu haya pedido al Gobierno expresamente que "se implique activamente" no solo para que se reconozca el derecho de autodeterminación de los saharauis sino para que puedan ejercerlo y le haya animado a reconocer a la autoproclamada República Árabe Saharaui Democrática (RASD).

Laya "hace el ridículo"

Por su parte, en otra pregunta ante el Pleno, la diputada del PP Valentina Martínez Ferro, ha criticado duramente a González Laya por la crisis con Marruecos, denunciando que lleva a cabo "una diplomacia tan discreta" que ni siquiera hay contactos con el país vecino. "No da puntada sin lío", ha afeado la 'popular', reclamando a la ministra de Exteriores que "deje de hacer el ridículo".

La portavoz del PP en la Comisión de Exteriores ha considerado comprensible que "sus compañeros la den por amortizada", en referencia su eventual salida en una crisis de Gobierno, ya que "ha conseguido que España sea irrelevante en la UE, en EEUU, en Iberoamérica y en el norte de África".

En este sentido, la ha responsabilizado directamente de haber autorizado la llegada a España del líder del Frento Polisario, Brahim Gali, por motivos humanitarios y de haber querido "dar carpetazo" al asunto "emulando el éxito de la 'operación Delcy', una chapuza propia de amateurs y no de una ministra de Exteriores".

"Ha dilapidado nuestra credibilidad y lo ha convertido en debilidad", ha lamentado Martínez Ferro, denunciando que por ello no se ha conseguido el apoyo del Consejo Europeo en la crisis con Marruecos, y el presidente estadounidense, Joe Biden, sigue sin llamar a Pedro Sánchez.

El PP es la solución

"España necesita un Gobierno creíble, fiable y respetado dentro y fuera de nuestras fronteras y eso no se consigue ni con mentiras ni con indultos", ha abundado, defendiendo que "el problema son ustedes y la solución somos nosotros".

Así, ha recordado que el presidente del PP, Pablo Casado, "ha propuesto un plan estratégico para el desarrollo de Ceuta y Melilla, revisar la política de exención de visados con Marruecos, hacer esas ciudades equiparables a las regiones ultraperiféricas e implicar a Frontex de forma más activa".

Para eso, ha rematado, "se necesita rectificar, una política exterior fuerte, eficaz y sensata que permita recuperar la relación de buena vecindad con Marruecos y con el resto de socios y aliados, pero ustedes no quieren soluciones, ustedes lo que quieren son líos".

González Laya, que en la última semana tras la salida de Brahim Gali de España de vuelta a Argelia no había hablado sobre la crisis con Marruecos, se ha defendido asegurando que el Gobierno "ni ha deseado ni alimenta" esta crisis.

Por eso, ha agregado, "está plenamente comprometido con mirar al futuro y con el diálogo" y es en esta línea en la que "estamos trabajando".

Seguir cooperando

En este sentido, ha puesto en valor la "cooperación modélica" que han llevado a cabo en los últimos años los dos países "en muchos ámbitos" y su "interdependencia", mostrándose convencida de que seguirá dando "frutos" en el futuro. "Confiamos en seguir desarrollando nuestra cooperación que ha sido tan beneficiosa para ambos países", ha agregado.

En cuanto a las críticas del PP, se ha defendido recordando que los 'populares' apoyaron la citada resolución en el Senado, en la que se sostenía que la cuestión del Sáhara Occidental "debe constituir una política de Estado alejada y despojada de controversias y enfrentamientos partidistas, que en nada favorecen la solución política requerida".

Así, ha afeado a los 'populares' que han tardado tres meses "en hacer estallar esta política de Estado. "Menos ocurrencias y más trabajar por el bien el común", les ha conminado, instándoles a una "vuelta a una política de Estado" si es que quieren ayudar.