El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha comparecido este miércoles para detallar las nuevas medidas contra el auge de la quinta ola. "Los datos son realmente preocupantes", ha afirmado al arranque de su intervención el mandatario, que ha alertado que en Galicia, pese a tener mejor situación que la media española, la evolución en los últimos días es peor. "Las previsiones que ha calculado el comité clínico nos preocupan" porque incidirán de forma sustancial en la presión hospitalaria, ha comentado.

Ese análisis ha llevado al Gobierno gallego a dar una importante marcha atrás en la desescalada. Feijóo ha explicado las nuevas medidas, que entrarán en vigor a las 00:00 del sábado. Para entrar en la hostelería de los siete concellos en nivel máximo (Sanxenxo pasa a este nivel) y los 29 en alto (entre ellos Vigo y varios de su comarca, Pontevedra y Ourense) hará falta uno de estos tres documentos: certificado de vacunación completa, prueba de COVID negativa o haber superado la enfermedad. Esta norma solo se aplicará en los interiores, y a las terrazas, que en ambos escalones quedan limitadas al 50%, se podrá acceder libremente.

Además, Feijóo ha anunciado varias medidas que suponen limitación de derechos y, por tanto, necesitan la aprobación del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). En primer lugar, se prohíben las reuniones de más de seis personas no convivientes en los interiores y de 10 de los exteriores. Además, se veta la movilidad durante la madrugada: entre la 1 y las 6 en los niveles máximo y alto; y entre las 3 y las 6 en aquellos de nivel medio y medio-bajo, que mantienen el ocio nocturno abierto.

En todo caso, los siete concellos en el nivel máximo de restricciones no tendrán cierre perimetral, como se venía haciendo hasta ahora. Estos municipios son: O Barco, Cambados, A Pobra, Boiro, Sanxenxo, Meaño y O Grove.