Dos meses después de declararse la guerra abierta entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso por el control del PP de Madrid, ha llegado una imagen de distensión. Pero no entre ellos dos, sino entre la presidenta de la Comunidad y el alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, la tercera persona en esta batalla interna. La presidenta de la Comunidad quiere liderar también el partido en la región. Ante este deseo, dado a conocer a principios de septiembre, el partido podría haber optado por dejarle el camino libre. Sin embargo, Casado, en una decisión que puede interpretarse como de miedo ante el poder que pueda reunir Ayuso, alentó que Almeida juguetee con su decisión de presentarse. Con dos candidatos, cómo no apostar por una "tercera vía", la opción que la dirección del PP nacional defiende.

La presidenta de la Comunidad quiere que esas primarias internas se convoquen cuanto antes. Y, tras unos días de silencio, ha vuelto a la carga con declaraciones casi diarias exigiéndolas. La cúpula de Casado recuerda que en una junta directiva en la que ella participó se decidió que el congreso regional, como en el resto de comunidades uniprovinciales, se celebrará la próxima primavera y no quiere ceder. Lo están viendo como un pulso. La fecha no es baladí. La madrileña obtuvo una victoria arrolladora el 4 de mayo en las autonómicas y, según señalan en la sede nacional, Ayuso teme que ese empuje vaya disminuyendo. Y en la dirección de los populares el temor es a una nueva lideresa, al estilo de Esperanza Aguirre, que pueda suponer un riesgo al liderazgo de Casado. Ante este escenario, Ayuso y Almeida almorzaron el pasado jueves en la sede del Gobierno madrileño, una cita adelantada por 'El Mundo' y confirmada por este diario. Según fuentes del equipo del alcalde, él le repitió en privado lo que defiende en público: que prefiere que una tercera persona sea la que coja las riendas del partido en la autonomía. En la cita, la dirigente madrileña también pudo adelantarle que al día siguiente, en la reunión interna del PP de Madrid que estaba convocada, iba a repetir una vez más su decisión de presentarse.

Fuentes del equipo de Ayuso explican que esa cita es una más de las que habitualmente realizan la presidenta y el alcalde de Madrid y que muestra la buena sintonía "de un tándem" que "algunos se empeñan en querer romper". Señalan en concreto al secretario general del PP, Teodoro García Egea, al que consideran como responsable de esta estrategia de intentar frenar a la política madrileña pidiendo a Almeida que dé un paso al frente. Esas mismas fuentes entienden la posición del alcalde en términos de "lealtad" a la dirección del PP, partido en el que, además, ejerce el cargo oficial de portavoz nacional.