El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha asegurado este miércoles que su partido no apoyará “gratuitamente” ningún Gobierno porque “tiene el derecho y el deber de formar parte” del Ejecutivo en Castilla y León, donde ha logrado 13 representantes en las últimas elecciones, por lo que si no es así, “votará en contra de cualquier investidura”.

Abascal ha hecho esas declaraciones en Murcia, donde ha participado en una manifestación convocada por organizaciones de agricultores y ganaderos para pedir soluciones para los graves problemas que atraviesa el sector.

“Los votos de Vox no se van a regalar”, ha subrayado, y ha insistido en que el partido ha defendido esa misma idea durante toda la campaña electoral, por lo que representará “los valores y condiciones” de sus votantes para lograr un “cambio de rumbo” en esa comunidad autónoma.

Por ello, ha pedido que se “respete” al partido y se le dé “lo mismo que a otras fuerzas políticas”, al tiempo que ha lamentado que el resto de formaciones no hayan dejado claro lo que van a hacer con los resultados electorales obtenidos.