Primera dimisión en la guerra del PP por el supuesto espionaje a la familia de Isabel Díaz Ayuso. Ángel Carromero, director general de Coordinación del alcalde de Madrid y hombre de la total confianza de Pablo Casado, ha dimitido este jueves. Esta mañana José Luis Martínez-Almeida compareció desde el Palacio de Cibeles para negar la implicación de la Empresa Municipal de la Vivienda y el Suelo (EMVS) en la operación que tiene convulsionada a la formación conservadora.

El alcalde salió al paso de las informaciones publicadas por 'El Confidencial' y 'El Mundo' que atribuían a Carromero el contacto con una empresa de espías para encontrar información dañina contra Ayuso y la supuesta implicación de un empleado de la EMVS con esos detectives. El regidor aseguró haber investigado internamente las conexiones, que quedaron desechadas.

Además, afirmó haber hablado con Carromero, insistiendo en que su colaborador le negó también haber estado detrás de estas acciones. Con todo, Almeida no despejó por completo sus dudas. Es más, el alcalde terminó su comparecencia asegurando que "no permitiría ninguna sospecha" y que, en caso de tener indicios de que cualquier empleado del Ayuntamiento hubiera participado en la operación, tomaría medidas. Citó expresamente a Ángel Carromero, que esta misma ha presentado su dimisión tras las últimas informaciones de 'El Confidencial' que apuntan a que el 'fontanero' de Génova investigó también al exmarido y a otra expareja de la presidenta regional.

La de Carromero es la primera dimisión dentro de la guerra que ayer terminó de estallar entre Génova y Sol. Después de que el alcalde compareciera, Ayuso convocó a los medios de comunicación en la sede del Gobierno regional para arremeter contra la dirección nacional de su partido por haberla acusado de corrupción sin pruebas, negar cualquier tráfico de influencias por el hecho de que su hermano cobrara una comisión legal por un contrato adjudicado desde la Comunidad de Madrid, y exigir "que se depuren responsabilidades" al más alto nivel.

Génova respondió anunciando la apertura de un expediente informativo y reservándose la posibilidad de llevar a cabo acciones legales contra la presidente por "las gravísimas acusaciones, casi delictivas" contra Casado.