El presidente la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, anunciará "a partir del miércoles" si da el paso para liderar el Partido Popular en sustitución de Pablo Casado y si, como la mayoría de dirigentes dan por hecho en el PP, presenta su candidatura al XX Congreso Nacional de la formación, que se celebrará en abril.

"A partir del miércoles, que es el primer día que se pueden tomar decisiones, anunciaré cuál es mi decisión; vamos a respetar los tiempos del congreso y la legitimidad de la Junta Directiva", ha dicho Feijóo en declaraciones a la prensa, al ser preguntado antes de la entrega de llaves a adjudicatarios de viviendas de promoción pública en Vigo.

Además, Feijóo ha agradecido este lunes el respaldo público que ayer le dio la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que, ha relatado, ya le había brindado días antes su apoyo en privado.

De la presidenta madrileña, cuyo choque con la dirección nacional detonó una crisis sin precedentes en el partido, Feijóo ha dicho que tiene en Madrid un cargo institucional de "extraordinaria relevancia" al frente de la "comunidad más prospera" y una "no menor" responsabilidad orgánica.

Feijóo, que ha agradecido también la adhesión a su posible candidatura del resto de barones populares, ha señalado que un presidente autonómico "tiene un voto", al igual que cualquier afiliado, por lo que "queda mucho congreso" por delante, tanto que "ni siquiera ha empezado".

La Junta Directiva Nacional del PP convocará formalmente el cónclave, 1 de marzo, y al día siguiente, miércoles, se abre el plazo para presentar candidaturas al congreso que elegirá un nuevo líder para el Partido Popular los días 2 y 3 de abril en Sevilla.

El proceso congresual del PP que se abre mañana finalizará con un nuevo líder, después de que Pablo Casado anunciase el pasado jueves, de común acuerdo con los dirigentes territoriales de su partido, que no se presentará y pidiese a Feijóo que se postule para sucederle.

Varias voces han apelado a que el XX Congreso del PP sea a lista única, pero no se pueden descartar candidaturas alternativas, que solo necesitan del visto bueno de cien afiliados para prosperar, aunque en el PP no creen que ningún peso pesado vaya a competir contra Feijóo.