El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha reconocido que Euskadi cumplirá las medidas recogidas en el real decreto ley de ahorro energético, aunque hayan sido impuestas sin contar con los sectores afectados y el consenso de las comunidades autónomas.

Urkullu, en las redes sociales, se ha referido a la polémica suscitada estos días en el País Vasco en torno al plan aprobado por el Gobierno de Pedro Sánchez.

Este martes la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, recordó que el Ejecutivo de Vitoria cuenta ya con un Plan de Contingencia Energética alineado con Europa y una Ley de Sostenibilidad de 2019, una normativa que contiene medidas que "no son efectistas y momentáneas", sino "a largo plazo".

Estas palabras fueron respondidas por el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, quien se preguntó si la consejera "prefiere no hacer nada y que se acaben cerrando empresas vascas".

El lehendakari ha señalado que las medidas aprobadas por el Gobierno español tienen un "rango" legal y, "sin duda, han de ser cumplidas", pero habría agradecido que las medidas sancionadoras contenidas en él hubieran tenido "un ejercicio de contraste de las diversas realidades que reflejan todos los sectores afectados, así como el conocimiento de la reflexión y actuación homogénea por parte de la UE".

A juicio de Urkullu, "lo prioritario" para lograr una "actuación global para la eficiencia energética y el ahorro en el consumo" es "la pedagogía y concienciación social" ya que ello supone un cambio de hábitos a medio plazo y requiere de "medidas realistas a corto plazo".

Urkullu ha recordado que Euskadi "lleva años apostando por una estrategia global para conseguir una mayor eficiencia y ahorro energético de sus edificios e instalaciones, más allá de estas medidas concretas que ahora se imponen".

Reconoce que las medidas adoptadas por el Gobierno de Sánchez encuentran "base competencial en la Constitución", pero ha echado en falta que se hubiera tenido "más en cuenta a las comunidades autónomas" para la "definición" de las normas.

"De esta forma, podría haber hecho patente, en este caso, la tan proclamada cogobernanza sin excluir, de inicio, la intervención normativa de las comunidades en la propuesta de medidas", ha añadido.

A pesar de ello, recalca el lehendakari, al tratarse de "una cuestión sobre la que no cabe disputa ideológica sino el reconocimiento de la realidad diferenciada, así como la capacidad de actuación demostrada por las instituciones vascas y la necesaria coordinación operativa", el Gobierno Vasco va a atender "la petición expresa de la vicepresidenta Teresa Ribera de que 'todos sumemos'".

Iñigo Urkullu concluye que el Gobierno Vasco que preside "está sumando de manera responsable".