Refundación del partido

Ciudadanos ultima una candidatura alternativa ante la falta de apoyos de Arrimadas y Bal

El equipo de refundación del partido pretende impulsar este lunes una candidatura alternativa ante la guerra abierta

Arrimadas y Bal en el pleno del Congreso.

Arrimadas y Bal en el pleno del Congreso. / Juan Carlos Hidalgo

Paloma Esteban

Ciudadanos encara días cruciales para conocer el futuro liderazgo del partido. La próxima semana es previsible se deben conocer las candidaturas definitivas —formalmente se registran entre el 26 y el 29 de diciembre, pero la Navidad obliga a que se desvelen antes— y también quedará claro si hay o no guerra abierta en primarias. Las incógnitas ahora aumentan porque este lunes el equipo encargado de la refundación del partido, con dirigentes de peso como la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís; el eurodiputado Adrián Vázquez o la diputada valenciana María Muñoz; y otros cargos conocidos como el exvicepresidente de Castilla y León, Paco Igea, tienen previsto reunirse en Madrid para hacer una propuesta de lista alternativa

La llamada ‘tercera vía’ que pretende dejar de lado la lista de Edmundo Bal y la propuesta de Inés Arrimadas. El objetivo pasa por forzar una nueva candidatura que evite la ruptura de la organización y que no podría tener a ninguno de los dos en los primeros puestos. Arrimadas, en realidad, ya renunció a encabezar una lista que también bautizó de unidad. El abogado del Estado, sin embargo, dio un paso adelante (aupado por muchos de sus compañeros) y sí quiere liderar la suya.

Crisis por "el sitio de Inés"

Al equipo de refundación casi en su conjunto (con la excepción del malagueño Guillermo Díaz, que apoya a Arrimadas) le une el objetivo de que el proceso de los últimos cinco meses para relanzar la formación en su último intento por sobrevivir no sea papel mojado. Todos insisten en que "ningún nombre puede estar por encima de la refundación" y que no permitirán que la organización se vea sometida a una batalla interna que solo conducirá a la ruptura.

Es este sentimiento el que empuja hacia esa 'tercera vía' que, sin embargo, también parece estar contaminada. Algunos dirigentes desconfían del sitio que podría ocupar Arrimadas teniendo en cuenta que la propia presidenta sigue insistiendo en que está elaborando una candidatura, "que está hablando con mucha gente" y que su objetivo es mantener la unidad. "No sabemos con quién ha hablado, ni qué nombres tiene. Parece que quisiera hacer suya la propuesta de refundación. Pero esto no va así. La candidatura alternativa no es el salvavidas de Inés", dice un dirigente.

Bal, no tantos apoyos

La realidad en este momento es que ni la presidenta cosecha tantos apoyos como esperaba ni tampoco Bal, convertido en la voz crítica con Arrimadas, está contando con el entusiasmo que esperaba inicialmente. De hecho, el grupo parlamentario en el Congreso (que parecía su gran apoyo de peso) se ha resquebrajado y ya no hay unanimidad con su figura.

En resumen, los encargados de relanzar el partido creen que la actual presidenta debe escenificar un paso al lado y que tampoco Bal ha actuado con la intención de unir el partido. Algunos movimientos del abogado del Estado han molestado a compañeros de la formación, que afirman incluso que “se ha pasado de frenada” en algunas de sus intenciones y declaraciones.

Así las cosas, el equipo de refundación sigue manteniendo contactos para lanzar al partido esa última posibilidad, una lista alternativa que tendría que ver cómo integrar a todos los sectores. Fuentes consultas por este diario aseguran que “aún se está cerrando la propuesta”, aunque algunos nombres siguen sonando con fuerza. Lo hicieron desde el primer día, como es el caso de Adrián Vazquez, a quienes una inmensa mayoría sigue señalando como "un candidato de consenso" para dirigir orgánicamente el partido en el cargo de secretario general, a pesar de que él no se ha pronunciado al respecto.

La portavocía política arroja más dudas porque implica dar con el nombre que pase a ser la cara visible y la voz del partido. "Hay distintas opciones encima de la mesa", según confirman a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA.

¿Un paso al lado de Bal y Arrimadas?

El abogado del Estado declaró estar dispuesto a hacerse a un lado si prosperaba una lista de unidad y si también percibía renuncias en el lado de Arrimadas, por ejemplo, dejando la portavocía del Congreso. El sector de Bal sigue pensando que ese cargo en la Cámara Baja debe de ir acompañado de lo que los afiliados elijan como portavoz del partido. “No tiene sentido que Arrimadas no esté en una candidatura pero siga de portavoz en el Congreso”, zanjan.

Hay miembros del equipo de refundación que ven esencial que los dos tengan presencia en la nueva candidatura, pero los vetos cruzados hacen muy difícil en este momento la convivencia. Arrimadas tiene claro que dará un paso al lado en lo que respecta al partido, pero no tiene intención de abandonar la portavocía parlamentaria. "Todos van a tener que ceder en algo o habrá guerra", coinciden distintos dirigentes.