SUMAR

Podemos convierte el acto de Yolanda Díaz en un examen a la lealtad de sus cargos

El partido endurece posiciones con una directriz que puede terminar por volverse en su contra

Irene Montero este martes en el Senado.

Irene Montero este martes en el Senado. / EFE

Ana Cabanillas

El órdago de Podemos Yolanda Díaz ha terminado por convertirse en un terremoto de consecuencias inesperadas. Este domingo se presenta en Madrid la candidatura de Sumar en un acto al que no acudirán los morados a menos que la dirigente acepte su exigencia de sellar un acuerdo de coalición con primarias abiertas. A cuatro días de la puesta de largo, el partido está dispuesto a cumplir su amenaza y ha convertido la cita en una suerte de examen sobre la lealtad de sus cuadros y cargos públicos. 

Después de las últimas negociaciones fallidas, los de Ione Belarra han endurecido su tesis de que nadie del partido acudirá a menos que Díaz acepte su exigencia de mínimos; una fórmula de votación que le permite hacerse fuerte frente al resto de integrantes de la candidatura. Hasta hace unos días, Podemos envolvía su amenaza en cierta ambigüedad, descartando la presencia de las caras más visibles de la formación en la foto de unidad en torno a la vicepresidenta segunda, pero dejando en el aire la presencia de una delegación de cuadros medios o perfiles menos conocidos. Esta opción les permitía estar en la foto sin concederle mayor protagonismo a la gallega. 

Podemos defiende que, de no haber acuerdo, no acudirá al acto ningún dirigente sometido a la disciplina de la dirección del partido

Pero ahora, tras los últimos desencuentros de los equipos negociadores, los morados parecen haberse enrocado aún más y suben la apuesta: la tesis a día de hoy es que este domingo, en caso de no haber acuerdo, no acudirá al polideportivo Magariños ningún dirigente, cuadro ni cargo público que esté sometido a la disciplina de la dirección del partido. Quien acuda, por tanto, lo hará a título personal y ateniéndose a las consecuencias a nivel interno.

Mensaje interno

El acuerdo no tiene visos de darse antes del domingo. Pero más allá del intento de aumentar la presión sobre Yolanda Díaz, el mensaje de Podemos se interpreta también en clave orgánica como una clara advertencia a sus propias filas. Una directriz que convierte el acto del domingo en un plebiscito sobre la lealtad a la formación y que sin embargo puede terminar por volverse en su contra.

La imagen -y el equilibrio de lealtades dentro de la organización- se ha movido mucho desde las últimas generales en 2019, cuando se eligió el grupo parlamentario; o desde 2021, cuando Podemos renovó sus órganos con Ione Belarra como secretaria general tras su designación por Pablo Iglesias.

Pablo Iglesias y Gómez-Reino junto a Yolanda Díaz, en A Coruña en febrero de 2020.

Pablo Iglesias y Gómez-Reino junto a Yolanda Díaz, en A Coruña en febrero de 2020. / CARLOS PARDELLAS

Muchos de los dirigentes elegidos entonces que todavía ocupan cargos públicos o forman parte de órganos del partido se han entregado a los brazos de Yolanda Díaz, convencidos de que es la única opción de enfrentarse con garantías a una contienda electoral. Algunos de ellos estarán arropándola este domingo en Madrid, aunque otros no podrán estar, bien por logística, bien por seguir -a regañadientes- la disciplina del partido. 

Delegación oficiosa de Podemos

Entre los diputados del Congreso que han confirmado su asistencia están, entre otros, la vicepresidenta segunda del Congreso, Gloria Elizo, que lleva años desvinculada de la dirección, y que ha apoyado sin rodeos a Díaz. También el secretario general del grupo parlamentario, el diputado valenciano Txema Guijarro, quien fuera una de las personas más leales a la dirección de Pablo Iglesias y que dimitió de la ejecutiva del partido hace ahora un año tras sus desavenencias con la estrategia emprendida por Podemos hacia la vicepresidenta gallega.

El diputado de Unidas Podemos y fundador de Alianza Verde, el diputado vasco Juantxo López de Uralde, que fue acogido en las listas de Podemos, también estará en la cita. Resulta también sorprendente la confirmación de la eurodiputada Eugenia Rodríguez Palop, que se ha mostrado muy próxima a la vicepresidenta del Gobierno y que fue un fichaje estrella del propio Iglesias, con quien mantenía amistad personal.

Una de las incógnitas será la presencia de dirigentes territoriales, que también han recibido la consigna clara de no asistir a menos que Díaz acepte sus exigencias. Aun así, y saltándose abiertamente esta directriz, estará también el consejero del Gobierno de coalición en Navarra, Eduardo Santos. La foto final y la representación oficiosa de Podemos a través de dirigentes insurrectos dará buena cuenta del estado de situación del partido morado, donde cada vez más voces -incluso afines a la dirección- alertan del "error" en las formas de plantear la negociación.

La ejecutiva de Podmeos, en Sumar

Es llamativa la presencia de una amplia muestra de miembros de la ejecutiva de Podemos, el llamado Consejo de Coordinación. Uno de sus miembros es el presidente del grupo parlamentario y portavoz de los comunes en el Congreso, Jaume Asens, que estará el domingo en Madrid pese a este cargo orgánico. Lo mismo sucede con Jessica Albiach, miembro de la ejecutiva y coordinadora de En Comú Podem, que también se ha volcado con Díaz, en sintonía con el apoyo total de la formación a Sumar.

Antón Gómez Reino es también miembro de la ejecutiva y estará también el domingo, al ser uno de los perfiles de más confianza de la vicepresidenta en el grupo parlamentario. "Yolanda Díaz puede ser la primera presidenta mujer", defendió este martes en rueda de prensa. Pese a la extrema lealtad que diputado por La Coruña guardaba hacia Pablo Iglesias durante su etapa como secretario general, la ofensiva abierta por los morados en los últimos meses ha terminado por distanciarle del partido y tomar posiciones por la próxima candidata a las generales. Junto a él es posible que acuda una delegación de Podemos en Galicia, que está controlado por el sector considerado yolandista.

Yolanda Díaz, Antón Gómez Reino y Lilith Verstrynge.

Yolanda Díaz, Antón Gómez Reino y Lilith Verstrynge. / EFE

Todos estos nombres se unen al de los diputados del grupo parlamentario de Unidas Podemos de los comunes de Ada Colau, que acudirán en tromba a respaldar a Díaz, como también lo hará la propia alcaldesa de Barcelona, una de sus principales valedoras desde su lanzamiento en solitario. También habrá numerosos cargos pertenecientes a Izquierda Unida y PCE, que estarán muy bien representados después de que Alberto Garzón brindara su respaldo público a la gallega, al igual que Enrique Santiago, después de meses tratando de ejercer de mediador, se ha decantado ya sin tapujos hacia la vicepresidenta segunda del Gobierno. Además de estos representantes del propio grupo morado, acudirán numerosas representaciones de distintos partidos, como Más Madrid, Compromís, Chunta Aragonesista, Más País, Equo o Proyecto Drago. A todos ellos terminó por cohesionarles la guerra abierta por Podemos, que provocó una reacción unánime a la hora de salir en auxilio de la dirigente gallega.