Con la Iglesia hemos topado. Esto es en resumen lo que lamenta Violeta Mangriñán después de encontrarse con la negativa del párroco a bautizar a su hija Gala con su hermana Lila como madrina al no estar esta bautizada. La influencer de la Vall d’Uixó ha mostrado su “máxima indignación” por este episodio. 

“Las normas son las normas y si quiero bautizar a Gala tendré que acatarlas, pero me parece un poco heavy”, lamenta la castellonense después de relatar cómo su madre y hermana se habían encontrado con la negativa del sacerdote a aceptar a Lila como madrina: “La indignación es máxima porque Lila ahora está dispuesta a bautizarse pero el cura les dice que no da tiempo”.

La exconcursante de 'Supervivientes' asegura a su vez que ella no tenía ilusión por el bautizo, a diferencia de la familia de su pareja, Fabio Colloricchio, pero no esperaba toparse con los problemas a la hora de bautizar a Gala. La Iglesia pide una serie de condiciones a los padrinos de aquellos que vayan a recibir el sacramento del bautismo y a escasos dos meses de que vaya a celebrarse el de Gala Colloricchio, Violeta ha descubierto que su hermana podría no acabar ejerciendo este papel como ha relatado en redes sociales, donde acumula cientos de miles de seguidores. 

Las reacciones a favor y en contra de la ‘influencer’ de Castellón no se ha hecho esperar, a pesar de que Violeta ha asegurado no tener nada en contra de la Iglesia y de sus normas.