La justicia alemana dejó ayer en libertad al marroquí Abdelghani Mzudi, de 30 años, después de que la Oficina Federal de lo Criminal descartara su participación en los ataques del 11-S en Washington y Nueva York. Mzudi ha estado 13 meses en la cárcel. Esta sentencia pone en entredicho las leyes antiterroristas de EEUU y el Reino Unido, entre otros, que tienen centenares de detenidos por su supuesta pertenencia a Al Qaeda o a otros grupos terroristas.

CÓMPLICES Según datos de la Oficina, a la llamada célula de Hamburgo que organizó los atentados sólo pertenecieron los pilotos suicidas Mohamed Atta, Marvan Aleshi y Jiad Jarrah, así como el enlace de Al Qaeda Ramzi Binalshib. Este último está detenido bajo custodia de EEUU y, según insinuó la fiscalía, ha sido su testimonio el que ha permitido salir de la cárcel a Mzudi.

Las declaraciones de Binalshib también exonerarían a Mounir el Motasadeq, el único --a parte de Mzudi-- en ser juzgado, y que cumple una pena de 15 años.