AGENTES de la policía vasca localizaron el pasado sábado un artefacto simulado en el camino de acceso al cuartel de Berrozi, la base de las fuerzas de élite de la Ertzaintza ubicada en una montaña alavesa. Los artificieros hicieron estallar la supuesta bomba de forma controlada mediante un cebo y comprobaron que no contenía explosivos.