La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, hizo ayer en París un llamamiento a favor de la apertura de "un nuevo capítulo en las relaciones" entre Europa y EEUU para "la construcción de un mundo más seguro". Totalmente identificada con su nuevo papel de "pasionaria de la reconciliación" --como la designan ya algunos medios franceses-- la secretaria de Estado reafirmó que su país "está dispuesto a trabajar con Europa por nuestros objetivos comunes". "Es hora de abrir un nuevo capítulo entre nuestras relaciones y nuestra alianza", añadió Rice, decidida a "superar los desacuerdos del pasado", en alusión a las divergencias con algunos países europeos, comenzando por Francia y Alemania, sobre la guerra en Irak. "Estados Unidos tiene mucho que ganar de una Europa fuerte en la construcción de un mundo mejor y más seguro", dijo.

Rice fue recibida por el presidente francés, Jacques Chirac, quien confirmó a Rice que Francia "comparte la voluntad de apoyar el proceso político iniciado con las elecciones iraquís", según dijo el portavoz del Elíseo, Jér“me Bonnafont.

Paralelamente, ayer se supo que los tres últimos franceses presos en Guantánamo serán repatriados en breve.