El presidente de Irán, Mohamed Jatamí, prometió ayer "un infierno" a cualquier Ejército que ose atacar su territorio. Rodeado de partidarios que coreaban "Muerte a América" y "Muerte a Israel", Jatamí proclamó: "Toda la nación iraní está unida ante cualquier amenaza o ataque; si los invasores atacan Irán, el país se convertirá en un infierno ardiente para ellos". A diferencia de Corea del Norte, las autoridades de Irán niegan estar fabricando armas nucleares.