Los rebeldes de la provincia indonesia de Aceh completaron ayer su desarme, casi un año después de que el impacto del tsunami en la región diese lugar al inicio de un proceso de paz para poner fin a tres décadas de conflicto armado en el norte de la isla de Sumatra. "A partir de hoy, el Movimiento para la Liberación de Aceh GAM, Gerakan Aceh Merdeka no tiene más armas, porque han sido entregadas todas al equipo de la AMM Misión de Supervisión de Aceh para su destrucción", declaró un portavoz de este organismo.

Los separatistas de Aceh han entregado en cuatro fases 1.001 armas, de las que la AMM ha aceptado 838, dos menos de las acordadas en agosto, aunque se esperaba alcanzar en cuestión de horas el número pactado. Los militares indonesios no reconocen 72 armas por ser de construcción artesanal.