El Ministerio de Interior francés organizó ayer una espectacular operación policial contra los supuestos autores del linchamiento de dos antidisturbios la pasada semana en un suburbio de París. Unos 220 agentes tomaron el barrio de Tarterˆts en Corbeil-Essonne, habitado por muchos inmigrantes, y detuvieron a 12 jóvenes, tres de ellos menores.

Entre los arrestados, de entre 14 y 28 años, se encontraban los supuestos autores de la agresión a los dos policías. Los jóvenes fueron identificados por varios testimonios, el ADN y las huellas digitales que dejaron en el lugar de los hechos, según la policía.

La redada era una promesa de Nicolas Sarkozy, ministro de Interior y candidato a la Presidencia de la República. El dirigente de la derecha dijo hace una semana que no escatimaría medios para detener a todos los responsables del linchamiento. En cambio, el Partido Socialista (PS) calificó la redada de "espectáculo", pese a que hace una semana "lamentó y denunció" la agresión a los policías como "un linchamiento". Varios representantes socialistas dijeron ayer que la operación tenía como propósito disimular el fracaso de la política de seguridad de Sarkozy.

En la madrugada de ayer, Sarkozy envió a la policía, que tomó estratégicamente las manzanas de los inmuebles donde residían los sospechosos. Los policías, armados y protegidos con casco y escudo, registraron todos los pisos y practicaron al menos 12 detenciones. Durante la operación, los agentes fueron el blanco de los insultos y diana de algunos proyectiles como piedras o botellas lanzadas desde las azoteas.

SATISFACCIÓN Las detenciones fueron acogidas con satisfacción por los sindicatos policiales, que en vísperas de las elecciones sindicales en su sector, denuncian desde hace tiempo el aumento de las agresiones a los funcionarios en todo el territorio francés. Varios vecinos del barrio manifestaron su satisfacción por las detenciones.