Las relaciones entre Occidente y el Ejecutivo de Irak, encabezado por Nuri al Maliki, y Occidente se deterioran a paso firme y ligero. El primer ministro iraquí se vio ayer envuelto en una agria polémica con líderes políticos de Francia y EEUU --concretamente con Hillary Clinton y Bernard Kouchner-- que habían lanzado fuertes críticas contra él, respondiéndoles de forma airada y exigiéndoles incluso disculpas.

La primera en recibir la ira de Maliki fue Hillary Clinton, senadora por Nueva York y candidata a las presidenciales del 2008. "Hay dirigentes norteamericanos que consideran a Irak como si fuera una de sus aldeas, por ejemplo Hillary Clinton y Carl Levin", declaró Maliki.

"GRAVE INTERFERENCIA" "Esto equivale a una grave interferencia en nuestros asuntos internos; Carl Levin y Hillary Clinton son del Partido Demócrata y deben demostrar que respetan la democracia", dijo. "Les pido que recuperen el sentido común y que hablen de forma respetuosa acerca de Irak", declaró. Clinton pidió públicamente al Parlamento iraquí que reemplazara a Maliki por su incapacidad para reconciliar a los diferentes grupos enfrentados en el conflicto.

Como prueba de que las relaciones entre Bagdad y Washington atraviesan uno de sus peores momentos, Maliki evocó uno de los temas que más duelen a Washington: el elevado número de víctimas civiles causado por las operaciones militares estadounidenses. "Lo hemos dicho en muchas ocasiones: cuando uno quiere arrestar a alguien, no es aceptable presentarse en el lugar, matar a otras 10 personas inocentes o destruir casas; eso son violaciones", espetó Maliki.

El ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, quien, en una entrevista con el semanario norteamericano Newsweek había solicitado públicamente la marcha de Maliki por su incapacidad para generar consenso político, fue también blanco de los dardos lanzados por Maliki. "Recientemente, hemos recibido al ministro francés; estábamos contentos y nos mostramos optimistas sobre el hecho de que esta visita marque el inicio de una nueva relación", declaró Maliki. "De golpe, nos ha sorprendido que haga una declaración que de ninguna manera puede ser calificada de diplomática, exigimos una disculpa de Francia", añadió.

Kouchner había asegurado al semanario que "mucha gente" estaba de acuerdo en que sea reemplazado el primer ministro iraquí, antes de puntualizar: "Pero no sé si esto se va a producir porque parece que Bush apoya a Maliki; pero el Gobierno no funciona". Kouchner acaba de volver de una visita de tres días de duración por Irak.