El Gobierno peruano declaró hoy el estado de emergencia en los departamentos de Tumbes, Piura, Lambayeque y Ucayali, debido a las lluvias e inundaciones registradas en el norte del país y que afectan a cerca de medio millón de personas. Hasta el momento, al menos 19 personas han muerto a consecuencia de las fuertes lluvias después de que tres niños de menos de cuatro años fallecieran cuando su vivienda quedó sepultada por un alud de tierra y lodo en la provincia de Amazonas.

El estado de emergencia, que estará en vigor por un plazo de 60 días, insta a los poderes públicos a iniciar acciones inmediatas para atender la emergencia y la rehabilitación de las zonas afectas, con especial atención a la población, zonas agrícolas, colegios y hospitales, así como las carreteras.

Según datos del Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI), desde el inicio de las lluvias, en enero, más de 60.000 viviendas se han visto afectadas por las inundaciones, mientras que cerca de 300 kilómetros de vías han sufrido daños. Los principales problemas fueron causados por los aludes de lodo, muy comunes en las alturas andinas, y por el desborde de ríos como el Zarumilla, próximo a la frontera con Ecuador, el Utcubamba y el Aguaytía. En la región de Huánuco, el río Huallaga se desbordó, lo que afectó a la ciudad de Tingo María y dejó a 600 familias damnificadas después de arrasar cientos de hectáreas de cultivos.

Cálculos del Ministerio del Agricultura cifran las pérdidas en el campo en esta región en unos 2,2 millones de euros. El INDECI comenzó el envío de ayuda humanitaria a las zonas más afectadas por la lluvia, especialmente tiendas de campaña, abrigos, agua y herramientas para controlar el desbordamiento de los ríos. El jefe del INDECI, Luis Palomino, no descartó declarar en emergencia otras regiones del país si la lluvia, tal y como se prevé, sigue anegando otras zonas.

El Servicio Nacional de Meteorología de Perú considera que lasd precipitaciones se mantendrán moderadas a fuertes hasta el próximo día 29.