El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, acusó hoy a Hugo Chávez de estar lleno de "promesas vacías y sed de poder", en una de sus declaraciones más duras contra el gobernante venezolano. En un discurso ante la Cámara de Comercio Hispana, en el que defendió la necesidad de aprobar el Tratado de Libre Comercio con Colombia, Bush arremetió contra Chávez, a quien acusó de mantener un "patrón preocupante de comportamiento provocador".

El presidente estadounidense aludió al reciente conflicto diplomático entre Bogotá y Quito por la incursión militar colombiana contra un campamento de la guerrilla de las FARC en territorio ecuatoriano, tras el cual Venezuela ordenó el envío de tropas a la frontera con Colombia. Chávez, apuntó Bush, alabó al "número dos" de esa guerrilla, "Raúl Reyes", que murió en el ataque colombiano, como "un buen revolucionario" y pidió que "se reconozca a los terroristas de las FARC como un Ejército legítimo".

Además, altos funcionarios venezolanos se han reunido con jefes de ese grupo guerrillero en Venezuela, agregó el presidente estadounidense. "A medida que intenta ampliar su influencia en América Latina, el régimen asegura que intenta promover la justicia social. En verdad, su agenda equivale a poco más que promesas vacías y una sed de poder", apuntó Bush.

Chávez -al que no mencionó nunca por su nombre- "ha derrochado la riqueza del petróleo en un esfuerzo por promover su visión anti-estadounidense y hostil", sostuvo. También, declaró, "ha permitido que sus ciudadanos sufran escasez de alimentos mientras amenaza a sus vecinos". La crisis andina, según Bush, ha puesto de relieve la existencia de una "alternativa drástica", o aceptar "la visión de los terroristas y los demagogos" que encabeza Chávez, o bien "apoyar activamente a líderes democráticos como el presidente (colombiano, Álvaro) Uribe".

Las palabras del presidente de EEUU constituyen algunas de las declaraciones más duras que ha emitido en los últimos tiempos contra su colega venezolano, al que evita cuidadosamente siempre mencionar por su nombre. Chávez, que quiere presentarse como una alternativa a la influencia de EEUU en América Latina, ha arremetido en cambio en numerosas ocasiones contra Bush, a quien llamó "el diablo" durante la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre de 2006.