La tensión crece por momentos en la frontera de Siria con Turquía paralelamente con el incremento del éxodo de ciudadanos sirios que huyen de la represión del régimen del presidente, Bashar al Asad. El Ejército sirio ha desplegado este jueves tropas en la carretera principal que une Aleppo, la segunda ciudad del país, con Turquía y de esta manera ha bloqueado esta vía, clave para el tráfico de mercancías desde Europa a los países de Oriente Próximo. Asimismo, los militares han detenido en Heitan a decenas de personas que intentaban cruzar a suelo turco. Uno de los vecinos de Heitan ha explicado que el régimen "intenta avanzarse a los disturbios en Aleppo con el corte de las principales vías de comunicación con Turquía". Las zonas del norte de Siria fronterizas con Turquía han visto crecer en las últimas semanas las reivindicaciones de reformas políticas en el país después de que el Ejército asaltara diversas poblaciones en la región de Yisr al Shogur, en la provincia de Idlib, al oeste de Aleppo, desde donde unas 10.000 personas han huido ya a Turquía. Los barrios del centro de Aleppo, una ciudad mayoritariamente suní, se ha mantenido al margen de las protestas en buena parte por la importante presencia de las fuerzas de seguridad y por las estrechas relaciones de los empresarios sunís con la jerarquía alauí que gobierna el país.