Los italianos revivieron ayer escenas de bajo imperio. Una comparecencia de Mario Monti en el Senado se vio empañada por el caos creado por miembros de la populista Liga Norte, que acusaron al primer ministro de ser un "payaso" y una "estafa" para los italianos, mientras otros portaban pancartas que rezaban "Basta impuestos".

El revuelo en el Senado, órgano ante el cual Monti había acudido para informar sobre los resultados de la última cumbre de la Unión Europa (UE), culminó con la suspensión de la sesión parlamentaria, en medio de las miradas de reprobación del resto de los senadores.

Paradójicamente, hasta los exaliados de la Liga, pareja de hecho de Silvio Berlusconi durante sus gobiernos, como el presidente del Senado, Renato Schifani, condenaron el griterío y los insultos. "No es una buena señal", dijo Schifani al portavoz de los senadores de la Liga, Federico Bricolo, minutos antes de interrumpir la sesión. La agresiva actitud de la Liga remite, según analistas locales, a la pérdida de poder de esta formación tras la caída de Berlusconi

Desactivado el bochorno, Monti, fiel a su flema británica, no desperdició la ocasión para explicar a la Liga Norte y al resto del Senado que su Ejecutivo no puede prometer "cero impuestos", pero "sí menos impuestos para las familias y las empresas" si la clase política se compromete a aplicar medidas más equitativas.

TRANSACCIONES FINANCIERAS Por ello, afirmó, su Gobierno promoverá ante la UE la aplicación de la tasa Tobin, el impuesto creado por el catedrático de Yale James Tobin (antiguo maestro de Monti) y que pretende gravar las transacciones financieras. A diferencia del anterior, el actual Ejecutivo "está dispuesto a aliarse con los países de la Unión" que abogan por esta hipótesis, puntualizó.

En esta línea, Monti defendió su plan de ajustes por 33.000 millones de euros, pues se trata de medidas que le han dado, dijo, "mayor credibilidad" a Italia, cuya alta deuda (120% del PIB) puso recientemente a prueba la solvencia del país.

Además, indicó que los eurobonos no son letra muerta e informó que, en ocasión de la presentación en marzo del informe sobre la crisis de la deuda de los países de la UE, Italia propondrá debatir sobre la aplicación de esta fórmula para estimular el crecimiento.

"No se trataría de un instrumento falso para evitar la disciplina financiera, sino de un mensaje fuerte para favorecer el crecimiento", dijo Monti. "Europa no debe olvidar que el verdadero problema es el crecimiento y el empleo", añadió, en referencia a Alemania.