Rebekah Brooks tiene unas cuantas papeletas más, para acabar en la cárcel. La exconsejera delegada de News International, gran protegida de Rupert Murdoch, y su marido, Charlie Brooks, amigo del primer ministro David Cameron, han sido imputados por obstrucción a la justicia. Ambos habrían tratado de ocultar archivos, documentos, ordenadores y otro material comprometedor a la policía, en julio del pasado año.

Los cargos, presentados contra la pareja por la fiscalía de la Corona, están relacionados con el escándalo de las escuchas ilegales en News of the World. Además de los Brooks, también han sido imputados por similares delitos, la secretaria y el chofer de Rebekah, así como el jefe de seguridad y el asesor de seguridad de News International, el cuartel general de Murdoch en Londres. Todos ellos comparecerán el próximo 13 de Junio ante el tribunal de Westminster.

Primeros juicios

Seis años después de que estallara el escándalo, estos son los primeros procesamientos por los pinchazos ilegales del dominical ya desaparecido. El delito de obstrucción a la justicia puede ser, teóricamente castigado con una pena máxima de cadena perpetua, según la legislación británica, aunque lo habitual es que las condenas sean mucho más leves. Al conocer la decisión, Brooks y marido han dicho lamentar lo que consideran una "injusta decisión". Sus procesamientos se producen tras dieciocho meses de investigaciones policiales, en la llamada operación Weeting. Otras 40 personas, detenidas en su día y en libertad condicional, están a la espera de saber si correrán idéntica suerte y serán a su vez imputadas.

La pasada semana, Brooks compareció ante la comisión que preside el juez Brian Leveson y durante cinco horas de interrogatorio, quedaron claras las estrechas relaciones que ha mantenido con los laboristas Tony Blair y Gordon Brown y con el conservador David Cameron, los tres últimos primeros ministros británicos.

Los vínculos de Cameron

Los vínculos con Cameron, que le enviaba mensajes firmados ("con todo mi cariño") son especialmente comprometedores. Brooks ha reconocido haber discutido con él, la investigación sobre las escuchas ilegales. Ambos han compartido, comidas y cenas, fiestas privadas y prácticas deportivas, como la equitación. Cameron contrató además como jefe de comunicación a Andy Coulson, después de que éste tuviera que dimitir como director de News of the World, cuando se descubrieron los primeros pinchazos telefónicos. Por si fuera poco, el actual ministro de Cultura, el conservador Jeremy Hunt, es sospechoso de haber tratado de favorecer la compra por parte de Murdoch de la plataforma de televisión, BSkyB.