Predicar con el ejemplo. Esta parece ser la máxima del nuevo Gobierno francés que ayer, en su primera reunión en el Elíseo, resolvió recortar los sueldos de los ministros un 30%. La medida, que formaba parte del programa electoral de los socialistas franceses, afecta al presidente del país, François Hollande, que a partir de ahora cobrará 14.910 euros brutos al mes frente a los 21.300 que ingresaba su antecesor, Nicolas Sarkozy.

"La eficacia y la ejemplaridad son palabras que guiarán a este Gobierno", avisó el portavoz del Ejecutivo, el franco-marroquí Najaty Vlland-Belkacem. Durante el Consejo, el primer ministro, Jean-Marc Ayrault, hizo firmar a los miembros del Gabinete --17 mujeres y 17 hombres, el primer paritario del país-- un código deontológico.