El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas ha afirmado este miércoles que no retirará el anexo constitucional aprobado poco antes de la celebración de la segunda ronda de las elecciones presidenciales.

El decreto promulgado por el Consejo Supremo implica que éste asume las competencias legislativas hasta que sean elegidos los miembros del nuevo Parlamento y mantiene el control de los asuntos militares. Asimismo, el anexo constitucional apunta a la debilitación directa de los poderes del presidente, incluyendo su derecho a nombrar al ministro de Defensa.

El representante de la junta militar en la Asamblea Constituyente, Mamduh Shahin, ha dicho que "ni se va a retirar el anexo ni va a haber una rendición ante los manifestantes en la plaza Tahrir", según ha informado el diario egipcio 'Al Masry al Youm'.

El martes, Hermanos Musulmanes anunció que la sentada que mantienen sus seguidores en la plaza Tahrir en El Cairo continúa convocada hasta que el Ejército retire el anexo constitucional, desmintiendo así algunas informaciones publicadas en los medios nacionales que indicaban que la protesta llegaba a su fin tras el anuncio del candidato del movimiento islamista, Mohamed Mursi, como vencedor de las elecciones.

"El presidente electo jurará su cargo ante el Tribunal Constitucional y la junta se está preparando para ello", ha agregado Shahin, contradiciendo la versión de la campaña electoral del candidato islamista, que dijo que Mursi no haría tal cosa, ya que ello significaría reconocer la validez del anexo.

Yasser Alí, miembro de la campaña de Mursi, indicó que éste jurará su cargo únicamente ante el Parlamento, ya que éste es el organismo legítimamente electo en base a la declaración constitucional, que data del 30 de junio.