Rusia ha propuesto este jueves cambios a la propuesta del enviado especial de Naciones Unidas y la Liga Árabe a Siria, Kofi Annan, relativa a la formación de un Gobierno de unidad que incluya a miembros del Ejecutivo y la oposición, aunque Estados Unidos, Francia y Reino Unido han rechazado las enmiendas, según fuentes diplomáticas occidentales.

El principal de los cambios sugeridos está relacionado con la negativa de Moscú a apoyar la salida del poder del presidente sirio, Bashar al Assad, según estas fuentes. En un principio, los países miembro del Consejo de Seguridad mostraron su apoyo a la propuesta de Annan, quien indicó que debería excluirse del Ejecutivo de unidad a toda aquella persona cuya participación pudiera dañar el proceso de transición, lo que parece una referencia directa a Al Assad.

El lenguaje acerca de la exclusión de determinadas personas es un punto central del plan de transición de Annan, que, según fuentes diplomáticas, no sería creíble en caso de dejar a Al Assad en el poder. "Sin la frase sobre las exclusiones no hay plan de transición", han agregado.

A pesar de su apoyo inicial a la propuesta, el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha protestado este jueves por el hecho de que algunos detalles de la misma fueran filtrados a la prensa. "Toda filtración a la prensa del borrador del plan de Annan es una prueba de las prácticas diplomáticas poco escrupulosas", ha dicho.

Una fuente diplomática ha señalado que Rusia está "dando marcha atrás" a su respaldo inicial, y ha subrayado que Estados Unidos, Francia y Reino Unido esperaron al visto bueno ruso antes de acordar que se debatiera la cuestión en Ginebra. La propuesta de Annan será uno de los principales asuntos que se tratarán en la reunión que mantendrá el Grupo de Acción sobre Siria el sábado en dicha localidad.

En este sentido, otro diplomático occidental ha dicho que Washington, París y Londres están recibiendo "mensajes contradictorios desde Moscú, lo que podría poner en duda la reunión".

Según un comunicado de su oficina, Annan ha invitado a la reunión a los ministros de Asuntos Exteriores de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU --Estados Unidos, Rusia, Francia, China y Reino Unido-- y al de Turquía, así como a los de Irak, Kuwait y Qatar por los cargos que ocupan dentro de la Liga Árabe.

También han sido invitados el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, y el de la Liga Árabe, Nabil Elaraby; la Alta Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Catherine Ashton. En el comunicado no se hace mención alguna a Irán.

La otra enmienda sugerida por Rusia, y rechazada igualmente por los países occidentales, es incluir un llamamiento al Gobierno y a la oposición para que pongan fin a los combates de forma simultánea. "Obviamente, el Ejecutivo ha de detener los combates antes", ha valorado una fuente occidental.