Al menos 11 personas han muerto y otras 20 han resultado heridas en un ataque perpetrado por insurgentes contra tres pueblos de la provincia afgana de Nuristán, cerca de la frontera con Pakistán, ayer viernes.

El asalto fue perpetrado por decenas de talibán paquistaníes, que rápidamente se vieron enzarzados en un enfrentamiento con la Policía afgana que se prolongó por espacio de unas doce horas y en el que resultaron destruidas medio centenar de viviendas.

Entre los fallecidos se encuentran cinco mujeres, tres policías y tres oficiales de seguridad locales, según informó el portavoz Mohamed Zareen a la cadena de televisión afgana Tolo.

Según el medio, varios de los asaltantes se han inmolado delante de una sede de Gobierno de la zona. Los heridos han sido trasladados a un hospital de la provincia cercana de Kamdesh.