Los servicio de emergencia nipones continuaron hoy las labores de búsqueda de los cinco desaparecidos que ha dejado a su paso por el país el tifón Man-yi, cuyos fuertes vientos y aguas torrenciales se han saldado por el momento con tres fallecidos.

En la prefectura de Mie, en el centro del archipiélago, un contingente de más de medio centenar de policías y bomberos retomaron hoy la búsqueda de una mujer y su hija pequeña de 10 años, después de que se haya encontrado su coche abandonado cerca de un río, detalló la agencia Kyodo.

Mientras, en la prefectura de Fukushima (noreste del país) buscan a un hombre de 60 años y en las de Hyogo (centro) e Iwate (noroeste) a dos mujeres más.

Las "lluvias torrenciales sin precedentes" y vientos de más de 160 kilómetros por hora que generó el tifón, con especial virulencia en el centro del país, provocaron la orden de evacuación de casi 500.000 residentes ante el temor de que se produjesen corrimientos de tierra e inundaciones.

Solo en la turística ciudad de Kioto, la policía emitió la orden de evacuación de 268.000 personas, ante el desbordamiento parcial del río Katsura, al oeste de la ciudad.

El tifón, el decimoctavo de la temporada en Japón, dejó, además, un balance de cerca de 1.500 casas inundadas y cerca de 139 personas con heridas de distinta consideración.

La fuerte lluvia provocó también la suspensión de varias líneas de "tren bala", (Shinkansen), trenes locales, autopistas y más de 600 vuelos internos en los principales aeropuertos del centro del país, a pesar de que hoy los servicios ya funcionan con normalidad en la mayor parte del país.

La Agencia Meteorológica de Japón ha levantado la alerta en las principales zonas del centro del país aunque ha mantenido la alerta amarilla y roja en el norte del archipiélago por el riesgo de inundaciones y fuertes vientos.