Al menos 16 personas han muerto al derrumbarse el techo de un centro comercial en la capital de Letonia, Riga, según fuentes el Ministerio del Interior de esa república báltica.

Según el portal electrónico Mixnews.lv, aún queda gente (hasta 30 personas) bajo los escombros del centro comercial "Máxima" y se teme que haya más víctimas.

Entre los fallecidos se encuentran al menos tres miembros de los equipos de rescate, según confirmó a medios letones la portavoz de Interior, Daiga Holma.

También hay supervivientes bajo los restos del derrumbe, según medios letones, que informaron de una víctima que logró llamar por teléfono a su hija para decir que está viva y que tiene la pierna herida.

Un periodista aseguró durante una conexión en directo con una emisora de radio local que había escuchado gritos bajo los escombros.

Las autoridades letonas se han dirigido a la población para pedirles que donen sangre para los supervivientes de la catástrofe.

El edificio, construido hace menos de dos años, sufrió al menos dos derrumbes a última hora de la tarde de ayer y fue en el segundo cuando fallecieron los miembros del equipo de rescate que ya se encontraban en el lugar de la tragedia.

El jefe adjunto del Servicio Estatal de Bomberos y Rescate, Normudn Plegermanis, apuntó esta madrugada que los trabajos de salvamento son muy complicados, ya que la estructura sufre nuevos derrumbes cada cierto tiempo.

Pocas horas después de la tragedia, las autoridades letonas informaron del traslado al hospital de una veintena de heridos.

La causa del derrumbe pudo ser la obra de ajardinamiento en la azotea del centro comercial, una posibilidad que ya investiga la policía y que ha sido tajantemente rechazada por la empresa constructora RE&RE.

Según el ministro de Interior letón, Rihard Kozlovskis, una señal de alarma sonó en una de las tiendas del centro comercial media hora antes del suceso.