La reconciliación entre bandos enemigos está llena de gestos. Ninguno más simbólico que el relativamente largo apretón de manos entre el príncipe Carlos, heredero al trono de Inglaterra y el antiguo dirigente del IRA y Presidente del Sinn Fein, Gerry Adams.
El breve encuentro ha tenido lugar en la universidad de Galway, en el Oeste de la República de Irlanda. El príncipe de Gales acaba de comenzar una visita oficial de dos días a aquel país y éste era el histórico instante tan esperado e impensable hace tan sólo unos pocos años. En este vídeo se puede ver el apretón.
El saludo, en una sala repleta de políticos y académicos, estuvo acompañado de unas cuantas palabras entre ambos y una leve sonrisa. Era la primera vez que un miembro de la familia real saludaba al presidente de la formación republicana, que durante décadas luchó con las armas contra los británicos.
PETICIÓN DEL REPUBLICANO
Fueron los representantes de Adams quienes pidieron el encuentro. Carlos aceptó, quizás a contra corazón, siguiendo así los pasos de su madre, Isabel II. La reina ya estrechó la mano del que fuera comandante del IRA, Martin McGuinness en Belfast en el 2012. Para el príncipe el paso dado hoy era aún más personal y doloroso.
En 1979 el IRA mató en un atentado al primo de la reina, lord Mounbatten, el tío abuelo de Carlos, al que estaba estrechamente unido y a quien consideraba como su mentor. Mañana, acompañado de su esposa Camila, el príncipe visitará el puerto de Mullaghmore, donde una bomba colocada debajo del yate de lord Mounbatten acabó con su vida, durante unas vacaciones.
