Unos 5.500 refugiados han llegado a Croacia desde el miércoles desde Serbia, en una confirmación de que el cierre de la frontera húngara está desviando la ruta que siguen los exiliados hacia Alemania y otros países ricos, informó hoy la emisora croata HRT, que cita fuentes de la Cruz Roja

Esta cifra supera las previsiones del propio Gobierno croata, que ayer calculó que llegarían unos 4.000 en los próximos días en su camino hacia Eslovenia, para entrar después en Austria por el sur y seguir camino, principalmente hacia Alemania.

"Croacia puede responder a una primera oleada de 1.500 personas por día", dijo el ministro del Interior, Ranko Ostojic, quien precisó que, si esa cifra aumenta, podrían ponerse en marcha dispositivos adicionales.

Su colega de Asuntos Exteriores, Vesna Pusic, advirtió de que el país puede afrontar la llegada de varios miles de refugiados, pero no de decenas de miles.

La emisora serbia RTS informó de que durante la noche arribaron a la frontera croata 40 autobuses y 180 taxis que trasladaban refugiados, que se apean y cruzan a pie a suelo croata, y que siguen llegando más.

Desde la frontera, los refugiados son llevados en trenes y autobuses a centros de alojamiento.

El Gobierno de Croacia se manifestó ayer dispuesto a establecer corredores que permitan a estas personas cruzar rápida y organizadamente su territorio camino del norte.

El primer ministro croata, Zoran Milanovic, criticó duramente la política de Hungría respecto a los refugiados diciendo que "los muros que se elevan no solo no detendrán a nadie, sino que además mandan un mensaje horroroso y peligroso".

La posibilidad de los corredores ha sido rechazada, sin embargo, por el Ministerio del Interior de Eslovenia, que recordó que supondría incumplir la normativa comunitaria que establece que el Estado miembro encargado de examinar una solicitud de asilo es aquel por el que primero entran a la UE los demandantes.

Los refugiados llegan a Croacia desde la frontera entre Serbia y Macedonia, por donde siguen afluyendo personas (ayer fueron 2.000) que han pasado antes por Grecia y Turquía, procedentes la mayoría de países en conflicto como Siria, Irak y Afganistán.