La oposición venezolana decidió finalmente aceptar la mediación vaticana y se reunirá con el Gobierno el domingo en la isla Margarita. Pero la relación entre el chavismo y la Mesa de Unidad Democrática (MUD) tiene antes varias pruebas difíciles que atravesar que pueden frustrar el encuentro. La MUD ha convocado para hoy una huelga general como parte de su hoja de ruta para forzar la realización del referéndum revocatorio del mandato de Nicolás Maduro. El presidente ordenó a las Fuerzas Armadas salir a la calle. Diosdado Cabello, el número dos de los bolivarianos, advirtió que la empresa que se atreva a sumarse a la protesta será tomada por los trabajadores y los militares.

El portavoz de la MUD, Jesús Chuo Torrealba anunció la presencia de la coalición de centroderecha en la isla Margarita después de unificar criterios. La oposición planteará que se retome la agenda electoral, «bien sea por la celebración del referéndum o por las elecciones generales». Para el dirigente esa es la única alternativa que despejará el temido horizonte de la confrontación. «Que no sean las balas y las botas; sino las firmas, las huellas y el voto los que decidan una solución», dijo.

A la par, la MUD mantiene su decisión de presionar al Gobierno en todos los frentes. La Asamblea Nacional (AN), donde tiene mayoría calificada, dio inicio a un proceso que debe desembocar en el juicio político de Maduro. Después de la huelga y la reunión del domingo, si es que no se produce el milagro del entendimiento, la oposición se propone llevar el próximo miércoles su nueva marcha hasta el Palacio de Miraflores.

El jefe de los diputados chavistas, Héctor Rodríguez, presentó ayer un recurso de nulidad de las acciones del Congreso ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Rodríguez dijo que será la máxima autoridad judicial la que determine «la ilegalidad y la inconstitucionalidad» de todos los actos de la Asamblea. El diputado recordó que mientras el Congreso no respete las sentencias del TSJ, sus actos «no tendrán ningún tipo de validez jurídica».

Rodríguez aseguró a la cadena televisiva Globovisión que la AN carece de «facultad constitucional» para enjuiciar a Maduro. En la AN no todos pudieron escucharlo: el edificio se quedó sin suministro eléctrico, denunció el diputado Henry Ramos Allup, quien acusó a las autoridades del corte.

«Respetamos, tal como reza en nuestra Constitución, el derecho que tienen los ciudadanos de manifestar pacíficamente. Es decisión de cada empresa, junto con sus trabajadores, sumarse o no a la huelga general», dijo en un comunicado la patronal Fedecámaras. Muchos empresarios dudan de adherirse a la protesta después de escuchar a Cabello: «La instrucción del presidente es empresa que se pare, empresa tomada por los trabajadores y por la Fuerza Armada. Aquí no vamos a permitir bochinche». H