El sistema de metro de Nueva York, donde se registran más de cinco millones de viajes diarios, va a seguir abierto; también, por ahora, la mayoría de las escuelas pero la vida de la ciudad se prepara para inminentes cambios para intentar frenar la propagación del coronavirus. Este jueves el gobernador del estado, Andrew Cuomo, ha anunciado que se van a prohibir las reuniones de 500 personas o más y, en las de menor capacidad, se va a reducir el aforo legal a la mitad.

La medida va a representar el cierre de Broadway, una industria de miles de millones de dólares que representa uno de los motores turísticos y económicos de la ciudad. En sus teatros el veto se empezará a aplicar este mismo jueves, mientras en otros recintos comenzará el viernes.

Ya antes del anuncio oficial de Cuomo otras instituciones habían anunciado cierres. El Museo Metropolitan no abrirá a partir del viernes por un tiempo indefinido y Carnegie Hall ha suspendido sus conciertos por lo menos hasta el día 31.

PASOS EN TODO EL PAÍS

Se intensifican los pasos, de autoridades y el sector privado, para luchar contra la enfermedad de Covid 19 de la que, de momento, hay 62 casos confirmados en la ciudad de Nueva York y 225 en todo el estado, uno de los tres epicentros por ahora de los brotes más significativos junto a los estados de Washington y California. En este último el gobernador, Gavin Newsom, no ha ido tan lejos como Cuomo pero sí ha recomendado que se cancelen o pospongan por lo menos hasta final de mes las reuniones con asistencia prevista de más de 250 personas. En ciudades del estado como San Francisco se ha instaurado una prohibición de reuniones de más de mil personas.

También en la capital del país, Washington DC, este jueves se han dado pasos. El Capitolio ha anunciado que se cierra para visitas al público por lo menos hasta abril.