La ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, ha alertado este lunes sobre las consecuencias que tendría que no se alcanzase un acuerdo con el Reino Unido sobre la situación fronteriza de Gibraltar antes del 1 de enero, cuando expire el periodo de transición y se consume el brexit.

"Si hay acuerdo, se sentirá menos entre la población y podremos seguir construyendo una zona de cooperación compartida. Pero, si no, este lugar se convertirá en una frontera exterior con todas sus consecuencias", ha advertido la ministra en una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press.

Laya, que ha recordado que la cuestión de la soberanía genera desacuerdo entre ambos países, ha insistido en que España es "consciente" de la situación de los gibraltareños, que votaron "para que Reino Unido permaneciera en la Unión Europea". "Quizás porque conocen del impacto que va a tener en el día a día", ha apuntado.

La jefa de la diplomacia española quiere "pensar" que tanto el Reino Unido como la UE negocian "de buena fe", aunque "algunos" digan "más que otros que una salida sin acuerdo sería muy costosa", y más aún para los británicos.

"Habrá un intento hasta el último minuto", ha continuado Laya, que ha asegurado que la "última cosa" que deberían hacer ambos actores es "añadir desconfianza" en una negociación "tremendamente complicada", en la que toca "deshacer y volver a recomponer" unos lazos que han unido a ambos durante "más de 50 años".

Capítulo cerrado

Así, la titular de Exteriores ha dejado claro que en la negociación "no se está poniendo en tela de cuestión la soberanía británica". "Todos somos conscientes de que ha habido un referéndum donde se han tomado unas disposiciones. Ese capítulo está cerrado, y hay que construir el siguiente", ha aseverado.

Eso sí, Laya ha reconocido la dificultad de "construir una relación a partir de un divorcio", cuando normalmente este tipo de relaciones se inician con países con los que se no se está "deshaciendo una relación precedente". "Lo más cercano que se me ocurre es divorcio de una pareja en que hay que decidir qué pasa con las cuentas en común, los muebles, la casa en la playa... todo eso es lo que estamos intentando negociar y qué tipo de relación queremos a futuro", ha continuado.

Por ello, la ministra ha confiado en que haya un acuerdo antes de 2021 para facilitar cuestiones como las conexiones entre el Reino Unido y la UE toda vez que, cuando expire el plazo, el país británico será a efectos prácticos "como Estados Unidos o como Canadá".