El inicio de una nueva era en EEUU ha arrancado este miércoles con la salida del presidente, Donald Trump y su esposa, Melania, de la Casa Blanca a las 8.13 horas (14.43 hora española). Desde allí se han dirigido a la base Andrews en el helicóptero Marine One y en el aeródromo militar el presidente saliente ha realizado su último discurso. Unas últimas palabras en las que tampoco ha mencionado a su sucesor, Joe Biden. Simplemente se ha limitado a desear éxitos a la nueva administración.

"Han sido cuatro años increíbles", ha asegurado al inicio de su alocución, antes de desgranar sus logros en defensa, empleo o impuestos. "Si no hubiera sido por la pandemia hubiéramos tenido números nunca vistos antes", ha destacado y ha vuelto a referirse al coronavirus como el "virus chino". "Trabajamos duro". Ni una palabra ha dedicado al asalto al Capitolio que protagonizaron seguidores suyos el pasado 6 de enero, ni tampoco del segundo 'impeachment' lanzado en su contra por incitar a sus fieles a atacar el Congreso.

Antes de subirse al avión presidencial, el Air Force One, para dirigirse a su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, Trump ha insistido en su intención de regresar al poder. "Volveremos de alguna forma", ha dicho.

El magnate neoyorquino ha realizado estas declaraciones poco más de tres horas antes de que tome posesión el presidente electo, Joe Biden. Será el primer presidente desde Andrew Johnson, en 1869, que no estará presente en la investidura de su sucesor.

El republicano se despidió anoche de la nación con un mensaje grabado en vídeo en el que insinuó su intención de continuar su carrera política: "El movimiento que pusimos en marcha está solo empezando", afirmó.

La pasada madrugada, en una de sus últimas decisiones como presidente de EEUU, Trump ha concedido 143 indultos. El más significativo es el otorgado a su exasesor Steve Bannon, acusado de fraude y todavía pendiente de condena. Otros perdonados son los raperos Lil Wayne y Kodak Black, condenados por posesión de armas, el exingeniero de Google Anthony Levandowski, condenado a 18 meses de cárcel por robar patentes antes de fichar por Uber, el exalcalde de Detroit Kwame Kilpatrick, condenado a 28 años de prisión por corrupción.