El ministro de Defensa ucraniano, Andriy Taran, ha declarado este sábado que Ucrania "no cederá" ante el aumento de la presencia militar de Rusia en la frontera común.

Para el ministro, Rusia ha difundido "historias de terror" sobre la renovación de las actividades de combate en el este de Ucrania con el objetivo "de despertar el pánico entre la población de Ucrania y atemorizar a la comunidad internacional" así como de "aumentar la presión sobre Ucrania con el fin de obligarla a ceder en el curso del proceso de negociación".

Frente a esto, el ministro ha mencionado que Ucrania está intensificando sus esfuerzos "políticos y diplomáticos" y ha considerado que la mejor solución es "acelerar" la entrada de Ucrania en la OTAN, algo que ya defendió esta semana el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, y que Rusia criticó advirtiendo que esta opción "agravaría la situación".

El comunicado del ministro de Defensa ucraniano llega en un momento de aumento de las tensiones y tras las acusaciones de Ucrania a Rusia por el despliegue de militares en una zona cercana a la frontera común, rechazadas desde Moscú, que argumenta que puede trasladar a sus militares por su territorio sin cortapisas.

Los Acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política al conflicto, pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia. Las hostilidades han dejado hasta la fecha unos 13.000 muertos, según estimaciones de la ONU.

Desde el 27 de julio de 2020 está en vigor en la zona un alto el fuego que, aunque ha reducido significativamente la violencia, no ha evitado que siga habiendo incidentes esporádicos que incluso siguen cobrándose vidas.