Los principales partidos de la derecha italiana ha anunciado este viernes haber llegado a un acuerdo para que el magnate Silvio Berlusconi, el controvertido líder de Forza Italia, sea su candidato único en la elección del próximo presidente de la República de Italia. El anuncio ha sido hecho esta tarde de manera simultánea por la Liga y Hermanos de Italia, los otros dos grandes partidos de la alianza conservadora, después de una reunión de casi dos horas en una de las residencias de Berlusconi en Villa Grande, en las afueras de Roma

La conversión de Berlusconi en el candidato oficial de la derecha supone que todos los parlamentarios de este bando voten a su favor en el Parlamento, el órgano encargado de la elección del nuevo presidente, y que celebrarán la primera votación el próximo 24 de enero. No obstante es incierto que, en caso de que Berlusconi no sea elegido en las primeras votaciones —cuando se requieren los dos tercios de los votantes para hacerse con el puesto—, su nombre permanezca sobre la mesa, tal como han adelantado algunos analistas.

Agresiva campaña

En los últimos días, el empresario, de 85 años y con problemas de salud, lanzó una agresiva campaña promocional para impulsar su candidatura, algo poco habitual en Italia en las elecciones de presidentes. Aún así, Berlusconi ha llegado a publicar una página en Il Giornale, diario de propiedad de su familia, para promocionarse. “¿Quién es Berlusconi? Una persona buena y generosa”, se escribió. Y también “el líder occidental más apreciado y aplaudido de la historia del Congreso de EEUU (8 minutos), y “el presidente del equipo que más ha ganado en la historia del fútbol mundial”, se añadió.

Además de ello, el político ha celebrado diversos encuentros en la capital italiana, y ha vuelto a aparecer en las redes sociales. Esto último, sin embargo, también ha provocado una reacción adversa, con grupos que ya han firmado peticiones y difundido 'memes' virales para que no obtenga el cargo. La razón es que, en los 17 años en los que influyó en Italia, Berlusconi fue protagonista de numerosos escándalos de distinto tipo, tanto por sus correrías con prostitutas que por sus supuestos vínculos con la mafia.