Los partidos de izquierda en Italia estudian estos días las opciones para hacer frente a una hipotética candidatura del ex primer ministro Silvio Berlusconi a la Presidencia de Italia, a menos de una semana de que los legisladores nacionales y un grupo de representantes regionales elijan al sucesor de Sergio Mattarella en el Quirinal.

La Liga, Hermanos de Italia y Fuerza Italia coinciden en que Berlusconi, líder de esta última formación, es "la figura adecuada" para ostentar la Presidencia. Así lo decidieron el pasado viernes, en un cónclave que vino precedido por los movimientos más que evidentes del dirigente conservador para sopesar si realmente puede tener los respaldos suficientes.

El líder de la Liga, Matteo Salvini, ha anunciado en las últimas horas que a principios de la próxima semana habrá una propuesta sobre la mesa "que convencerá a muchos, si no a todos", pero desde Forza Italia se han apresurado a señalar que todas las formaciones conservadoras coinciden en que Berlusconi tiene el "perfil" que requiere el puesto y niegan por ahora divisiones, informa Adnkronos.

Fuentes de la Liga han asegurado a 'Il Corriere della Sera' que el centro-derecha no puede permitirse llegar a al lunes "con un panorama aún incierto", lo que explicaría las premuras públicas de Salvini. El 'plan B' pasaría por recurrir a otra figura menos quemada que la de Berlusconi, como la presidenta del Senado, Maria Elisabetta Casellati, la exalcaldesa de Milán Letizia Moratti o el senador Marcello Pera.

Una superviviente del Holocausto de 91 años

El secretario general del Partido Democrático, Enrico Letta, ya dejó claro que, para su formación, Berlusconi no tiene el más mínimo pase, y en el Movimiento 5 Estrellas (M5S) han comenzado igualmente a mover ficha. Según Adnkronos, este miércoles tendrá lugar una reunión de Letta con el líder del M5S, Giuseppe Conte, y el responsable de Artículo Uno y ministro de Sanidad, Roberto Speranza.

El M5S estaría estudiando las opciones de la senadora vitalicia Liliana Segre, una superviviente del Holocausto de 91 años, como potencial candidata de consenso. Por su parte, un grupo escindido del partido de Conte habría deslizado el nombre del magistrado Paolo Maddalena, aunque éste no ha tardado en descartarse por su edad (85 años), según la cadena Sky.

Ningún bloque suma una mayoría suficiente para obtener los dos tercios de los votos que necesita un candidato para alzarse como presidente en las tres primeras vueltas, pero en el centro-izquierda temen que los conservadores tengan opciones a partir de la cuarta, cuando basta la mayoría absoluta.

En los últimos días, han vuelto a surgir voces en favor de un segundo mandato de Mattarella, a pesar de que éste ya da por cerrada su etapa en el Quirinal, y de Mario Draghi, actual primer ministro. Uno de los últimos en apoyarle públicamente fue el líder del partido Italia Viva, Matteo Renzi, que el lunes declaró que Berlusconi "no tiene posibilidades de ser elegido".

Draghi se ha mostrado cauto y ha evitado descartarse de plano, pero su designación como presidente abriría un nuevo frente: el de la renovación del Gobierno. El gabinete se sustenta a duras penas sobre una amalgama de partidos, intereses e ideologías diversas y no parece que ningún sustituto pudiese ser capaz de navegar en esas aguas.