Las tropas rusas han intensificado en las últimas horas los ataques contra la acería de Azovstal, en la asediada ciudad de Mariúpol, donde está en marcha una nueva evacuación de civiles, según fuentes ucranianas.

El último parte del Alto Mando del Ejército ucraniano indica que "los invasores rusos continúan bloqueando las unidades de defensa ucranianas dentro de la planta de Azovstal", el último reducto de la resistencia ucraniana en esa estratégica ciudad portuaria.

En esa instalación resisten todavía cientos de civiles atrincherados desde el inicio de la invasión el pasado 24 de febrero, incluidos niños, aunque algunos ya han podido salir gracias a una operación de evacuación auspiciada por la ONU y la Cruz Roja.

La próxima etapa de rescate de civiles de la planta acerera Azovstal de Mariúpol está en marcha, aseguró este viernes el jefe de la Oficina de la Presidencia ucraniana, Andriy Yermak.

Agregó que durante la "compleja operación" para evacuar a civiles de Mariúpol y la planta acerera Azovstal se ha logrado rescatar ya a casi quinientas personas.

El secretario general de la ONU, António Guterres, informó en Twitter de que en la operación conjunta de Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) "dos convoyes de paso seguro evacuaron con éxito a casi quinientas personas de la planta de Azovstal, Mariúpol y alrededores".

Ofensiva rusa

Se mantiene la ofensiva en el este, donde Moscú aspira a lograr el control total de las regiones de Donetsk y Lugansk, y establecer una ruta terrestre entre esos territorios y la Crimea temporalmente ocupada.

El parte militar de Kiev precisa que Rusia ha atacado las posiciones ucranianas en dirección a Lyman, Siversk y Popasna, mientras que en el norte de la región de Jérson y Mykolaiv, los invasores rusos bombardearon los asentamientos de los que se habían retirado.

Más calmada ha estado la situación en dirección a South Bug, el segundo río más importante del país que desemboca en el Mar Negro, donde el enemigo mantuvo las fronteras capturadas.

Según el mando ucraniano, las tropas rusas están ampliando los sistemas de defensa aérea, al mismo tiempo que se están reagrupando y restableciendo la capacidad de combate de sus unidades.

A este respecto, el Gobierno alemán confirmó este viernes que suministrará a Ucrania siete obuses autopropulsados tipo "Panzerhaubitze 2000", que se suman a los cinco que ya ha comprometido Países Bajos con el mismo objetivo.

Lavrov relativiza las sanciones

El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, afirmó este viernes que no hay sanciones capaces de quebrantar la voluntad del pueblo y de las autoridades de Rusia.

"Ningún castigo, ninguna sanción, podrán quebrantar la voluntad del pueblo y el Gobierno de Rusia, que tienen como objetivo defender la verdad histórica y los intereses legítimos de la Federación Rusa", dijo Lavrov en una ceremonia de recuerdo a los diplomáticos rusos caídos en la Segunda Guerra Mundial.

Lavrov dice que no hay sanciones que puedan con la voluntad del pueblo ruso

Agregó que se trata de impedir que junto a las fronteras de Rusia se creen "amenazas directas a la seguridad, cultura e historia" de su país.

Lavrov indicó que actualmente se decide el destino del mundo, si será unipolar, "bajo el mando total de Estados Unidos, como quiere Washington y a lo que se han resignado todos los demás países occidentales, o será justo y democrático".

Este viernes, los países de la Unión Europea debatirán una nueva ronda de sanciones contra Rusia, el sexto paquete correctivo desde el comienzo de lo que Moscú denomina "operación militar especial" en Ucrania.

"Crímenes de guerra"

La secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, denunció este viernes "ataques ilegítimos" y "homicidios deliberados" contra civiles ucranianos en localidades de la periferia de Kiev al tiempo que exigió que las fuerzas rusas respondan ante la justicia internacional por esos "crímenes de guerra".

Callamard relató hoy en una conferencia celebrada en Kiev los hallazgos de una nueva investigación en esa provincia, cuyos pormenores detallan en su informe "He's Not Coming Back': War Crimes in Northwest Areas of Kyiv Oblast".

En el documento presentado hoy AI condena los ataques perpetrados por los rusos en Ucrania y pide que estos rindan cuentas y respondan ante la justicia "por una serie de crímenes de guerra cometidos en el noroeste de Kiev".

La organización se basa en decenas de entrevistas hechas a ucranianos y en un análisis de pruebas materiales recabadas sobre el terreno, y documenta ataques aéreos ilegítimos cometidos por los rusos en Borodyanka y ejecuciones extrajudiciales en otras localidades y pueblos, incluidos Bucha, Andriivka, Zdvyzhivka y Vorzel.