Un grupo de 31 presos se fugó este domingo de un centro de detención de Beirut en circunstancias que todavía se desconocen, y las fuerzas de seguridad libanesas han iniciado una investigación para arrestar a los huidos, según fuentes oficiales.

Las Fuerzas de Seguridad Interna del Líbano anunciaron en Twitter que los 31 presos, de los que no ofrecieron detalles, se fugaron del centro de detención Adliye de Beirut la madrugada del sábado al domingo.

Tampoco explicaron cómo lograron escapar pero aseguraron que han iniciado una investigación para capturar a los fugitivos.

Por su parte, el jefe de la comisión parlamentaria de Derechos Humanos del Líbano, el diputado Michel Moussa, exigió "el cierre" de las instalaciones, según la agencia de noticias estatal libanesa, ANN.

"¿Cómo puede este gran número de presos escapar de un lugar que se supone que está protegido por seguridad y que está sellado con placas de hierro?", se preguntó el parlamentario, que anunció que la comisión que encabeza "dará seguimiento a lo ocurrido hoy, así como a la situación de las cárceles en todos sus aspectos".

Según ANN, Moussa recordó que varios responsables han exigido "a lo largo de los años" el cierre del centro de detención de Adliye porque no cumple con "los requisitos mínimos de una prisión", y pidió a las autoridades judiciales que "aceleren los juicios" de los presos que todavía no han recibido una condena.