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Estados Unidos

Los republicanos vuelven a colocar la inmigración como tema central en las elecciones de EEUU de 2022

El envío de migrantes a ciudades demócratas, criticado como maniobra política, redirige a la frontera la atención mediática y de los votantes

Migrantes solicitantes de asilo, en su mayoría de Cuba y Venezuela, esperan a ser llevados ante la policía de fronteras de EEUU. Reuters

Corría abril cuando el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, empezó a enviar a Washington DC, a Nueva York y a Chicago autobuses llenos de migrantes que habían llegado a Estados Unidos buscando asilo. Le siguió al mes siguiente su homólogo de Arizona, Doug Doucey. Y en septiembre se sumó a su campaña el gobernador de Florida, Ron DeSantis, fletando dos vuelos que llevaron a 50 venezolanos desde San Antonio (Texas) hasta la acomodada isla de Martha’s Vineyard, en Massachusetts.

La maniobra de los republicanos de trasladar en algunos casos bajo engaño a los migrantes a ciudades gobernadas por los demócratas, sin aviso a las autoridades locales para prepararse para recibirles, fue inmediatamente denunciada como inhumana. Las acusaciones de estar usando a los migrantes como "peones políticos" llegaron formalmente a una demanda presentada contra DeSantis. Y muchos han visto en sus acciones ecos de una campaña racista que en los años 60 realizaron los segregacionistas del sur. Estos, en los llamados 'reverse freedom rides' y en respuesta a los viajes que activistas de derechos civiles habían hecho por el sur para reclamar la aplicación de la sentencia del Tribunal Supremo que acabó con la segregación racial en Estados Unidos, enviaron a ciudades demócratas del norte a familias negras.

La idea de Abbot, Doucey y DeSantis no es nueva. La tuvo en 2015 el gobernador de Arkansas, Mike Huckabee, cuando aspiraba a la nominación presidencial republicana y planteó hacer lo mismo con los refugiados sirios que entonces llegaban al país. Y la barajó también en las anteriores legislativas, en 2018, Donald Trump. Pero si entonces el presidente tuvo que desistir ante las preocupaciones sobre la potencial ilegalidad que planteaba su acción, los tres gobernadores la han llevado a la práctica.

Inflación y migración

Con ello han conseguido lo que pretendían: por una parte, hacer que la atención mediática se vuelva de nuevo a la situación en la frontera, donde en el último año se han batido récords y las autoridades han tenido casi 2,5 millones de encuentros con migrantes que han entrado sin papeles. Y, por otra, colocar de nuevo la inmigración como uno de los temas prominentes de cara a las elecciones legislativas, que se celebran el 8 de noviembre.

Aunque la preocupación dominante para la mayoría de votantes es la inflación y la situación económica general, la inmigración aparece en algunos sondeos en cuarta posición. Es una cuestión que suele movilizar a las bases republicanas, como se ratificó en la primera campaña presidencial de Trump, en la que su promesa de construir el muro en la frontera con México se transformó en eslogan y clamor y ayudó a llevarle a la Casa Blanca. Y es también un terreno político donde, según los sondeos, más votantes consideran a los republicanos más capacitados para resolver problemas que a los demócratas, que en estas elecciones enfrentan además el desencanto de grupos de activistas proinmigrantes ante promesas incumplidas de Biden, que envió en su primer día en el Despacho Oval una propuesta de reforma al Congreso que languidece allí.

Las acciones de Abbott, DeSantis y Doucey son la prueba más contundente del peso y la influencia que sigue teniendo Trump en el partido, pero no la única. Decenas de candidatos republicanos replican en esta campaña su mensaje xenófobo y en cientos de anuncios, tuits y discursos se usan términos como "invasión", el mismo que esgrimía Trump en las legislativas de 2018, cuando llegó a enviar efectivos de la guardia nacional a la frontera conforme se acercaba una caravana de migrantes.

"Teoría del reemplazo"

Ha calado en la formación, además, la explotación de la vena conspiranoica y, en esta campaña, varios candidatos, desde la congresista ultra Marjorie Taylor Greene hasta el aspirante al Senado en Ohio JD Vance han invocado en su discurso versiones de la nacionalista y supremacista blanca "teoría del reemplazo".

Si el día 8 los republicanos se hacen, como pronostican los sondeos, con el control del Congreso, discursos y acciones pueden ir más allá. Vance ha propuesto, por ejemplo, condicionar la financiación operativa del Gobierno a que la Administración Biden vuelva a financiar la construcción del muro. Algunos han amenazado con someter a un impeachment al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas. Y se alejarán las opciones de regular de forma permanente las protecciones que el programa DACA implementado por Barack Obama dio a inmigrantes que habían llegado de niños, los 'dreamers'. un programa que Biden ha prolongado temporalmente pero que podría acabar siendo declarado ilegal por el Tribunal Supremo de mayoría conservadora.

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