Guerra en Ucrania

Rusia bombardea Ucrania con más de 120 misiles de crucero

Se trata del mayor ataque registrado en las últimas semanas | Todo el país se encuentra en alerta

Un edificio destruido por las bombas rusas en Mariúpol.

Un edificio destruido por las bombas rusas en Mariúpol. / Reuters

Bloomberg

Rusia arrojó decenas de misiles sobre ciudades ucranianas en uno de sus bombardeos más fuertes de la guerra, presionando aún más con una campaña para destruir objetivos civiles luego de que Moscú rechazara las posibilidades de negociaciones para poner fin a la invasión.

En el décimo gran ataque desde septiembre, las fuerzas del presidente Vladímir Putin dispararon 69 misiles de crucero, según Valeriy Zaluzhnyi, comandante en jefe del Ejército ucraniano. Según las autoridades, Ucrania derribó 54 de ellos, además de 11 drones de fabricación iraní.

Las fuerzas de Kiev frustraron el intento de Rusia de dejar a los ucranianos sin electricidad antes de las celebraciones de Año Nuevo, pese a que fueron alcanzadas algunas instalaciones energéticas, escribió en Telegram el primer ministro Denys Shmyhal.

"Las fuerzas de defensa aérea de Ucrania demostraron un increíble nivel de habilidad y eficiencia", señaló.

El ataque coincidió con una entrevista con el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, quien dijo que el Kremlin no discutirá las demandas de Ucrania de que se retire de las tierras ocupadas y pague por las reparaciones.

Después de sufrir reveses en el campo de batalla durante meses, Rusia apunta cada vez más a atacar infraestructura energética y civil en un intento hasta ahora infructuoso de acabar con la determinación de los ucranianos de combatir las fuerzas de Putin.

En otro incidente, la vecina Bielorrusia reportó que derribó un misil antiaéreo S-300 sobre su territorio que fue lanzado desde Ucrania el jueves por la mañana.

El bombardeo ruso del jueves fue lanzado contra infraestructura eléctrica en ciudades de toda Ucrania, incluida la capital, Kiev, además de Járkov y Sumy, en el norte. Los misiles, lanzados desde bombarderos estratégicos y barcos rusos en el mar Negro, dejaron sin energía al 90% de Leópolis, una ciudad cercana a la frontera occidental de Ucrania con Polonia, y causaron grandes apagones en Odesa, en el sur, según informes de autoridades locales y militares.

Las fuerzas de defensa aérea de Ucrania derribaron al menos 21 misiles sobre Odesa y los 16 que apuntaban a Kiev, dijo un portavoz. Cinco más fueron derribados sobre la región de Nicolaiev, en el sur. Eso se sumó a los 420 misiles y 430 drones rusos derribados por las tropas de Kiev desde que Moscú comenzó los grandes bombardeos en septiembre.

Las autoridades rusas no han hecho comentarios sobre el ataque. La semana pasada, en el undécimo mes desde que se inició la guerra, Putin admitió que sus fuerzas enfrentan una situación "extremadamente difícil" en los cuatro territorios anexados por Rusia desde que ordenó la invasión el 24 de febrero.

Si bien las Naciones Unidas han condenado el "intento de anexión ilegal" de Rusia de las áreas después de que, en septiembre, Putin firmó decretos para anexarlas a su país, Lavrov dijo esta semana que Kiev debería ceder la soberanía sobre las áreas.

Zelenski ha prometido recuperar todo el territorio ucraniano ocupado por Rusia, y las fuerzas de Kiev están haciendo retroceder constantemente a las tropas rusas con la ayuda de miles de millones de dólares en armas de Estados Unidos y Europa.

No obstante, hay señales que indican que la guerra podría extenderse hasta bien entrado el próximo año, después de que Rusia movilizara hace poco a unos 300.000 reservistas.

El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmitro Kuleba, dijo el lunes en una entrevista con Associated Press que su país quiere celebrar una cumbre de paz en febrero, pero no prevé que Rusia participe.

Kiev está lista para sostener conversaciones directas con Moscú solo después de que Rusia se enfrente a un tribunal de crímenes de guerra, indicó. Lavrov dijo en su entrevista que Rusia no se someterá a ningún tribunal.