Apelación en Florida

Pablo Ibar afronta “muy esperanzado" su "última oportunidad” tras la vista de Florida

Su abogado presentó el martes una apelación para que se revoque la condena a cadena perpetua que enfrenta el reo hispano-estadounidense, en prisión desde 1994

Pablo Ibar pide revocar la condena a cadena perpetua por fallos en el proceso

Pablo Ibar pide revocar la condena a cadena perpetua por fallos en el proceso

Ricardo Mir de Francia

La interminable odisea de Pablo Ibar por las distintas instancias de la justicia de Florida afronta en los próximos meses otro de sus momentos decisivos. Su abogado solicitó el martes ante un tribunal de apelaciones del estado que se revoque su sentencia a cadena perpetua y se celebre un nuevo juicio en el que pueda demostrar la inocencia que lleva defendiendo desde que fuera condenado hace casi tres décadas por un triple asesinato. “La vista salió todo lo bien que podría haber salido. Las preguntas de los jueces dieron pie a respuestas que favorecen nuestro caso. Estamos muy esperanzados”, ha explicado este miércoles Joe Nascimento, el abogado de Ibar. Esta vez los tiempos de la apelación podrían ser cruciales porque el clima político en Florida vuelve a ser de máxima intransigencia ante los delitos graves. 

Ibar no pudo seguir la vista por videoconferencia, pero logró hablar con su abogado al término de la vista celebrada ante los tres magistrados del tribunal de apelaciones del Distrito Cuarto de Florida, presidido por la jueza Melanie May. “Sigue estando muy esperanzado ante la que cree que será su última oportunidad, pero mantiene la cautela y no quiere hacerse demasiadas ilusiones porque tiene miedo de llevarse una nueva decepción”, explicó el abogado del reo hispano-estadounidense, sobrino del legendario boxeador vasco Jose Manuel Ibar ‘Urtain’. Esa cautela es como mínimo comprensible, dados los bandazos que su caso ha experimentado desde que ingresara en prisión en 1994. 

Tras ser acusado aquel año por el triple asesinato de Casimir Sucharski (dueño de un club nocturno) y las bailarinas Sharon Anderson y Marie Rogers, un crimen que siempre ha negado, Ibar fue condenado a la pena capital en el año 2000. Pasó 16 años en el corredor de la muerte hasta que el Tribunal Supremo de Florida invalidó la sentencia en 2016 al considerar “demasiado endebles” las pruebas sobre las que se sustentaba y refrendar la “mala praxis” del letrado que le defendió. El juicio volvió a repetirse y en 2019 Ibar fue de nuevo condenado, esta vez a cadena perpetua. 

Los doce motivos de la defensa

Y esa es la sentencia que su equipo aspira ahora a revocar tras alegar que en el último juicio se violaron los derechos constitucionales de Ibar. En la vista de este martes Nascimento presentó 12 motivos para sustentar esa tesis.  Empezando por la presunta "contaminación" durante su custodia de la prueba principal del caso, la camiseta con la que uno de los autores del crimen se cubrió la cara durante el suceso. Un analista declaró en el último juicio que la bolsa con la camiseta, en la que aparecen solo trazas genéticas residuales del ADN de Ibar, llegó al laboratorio en una bolsa con el precinto parcialmente abierto. A lo que hay que sumar que hasta entonces la prueba no había sido parte del sumario, como determinó el Supremo de Florida en 2016, al concluir que no existían "pruebas físicas" que conectaran al reo con el crimen. 

Nascimento, que ya defendió al hispano-estadounidense en el último juicio, también cuestionó la veracidad del testimonio del vecino de Sucharsky que identificó a Ibar en una rueda de reconocimiento, al alegar que poco antes la policía le enseñó una foto suya. Paralelamente, durante los 20 minutos que tuvo para exponer sus argumentos durante la vista, acusó al magistrado Dennis Bailey, quien dirigió el último juicio, de haber “abusado de su discrecionalidad” al apartar del jurado a uno de sus miembros, quien denunció presiones por parte de sus compañeros. 

Las preguntas de los magistrados a la Fiscalía este martes han hecho pensar al equipo de Ibar que la apelación podría llegar a buen puerto. No solo preguntaron si acaso no debería haber más rastros del ADN de Ibar en la camiseta, teniendo en cuenta que uno de los autores del crimen la utilizó para cubrirse la cara y secarse el sudor durante muchos minutos, sino que también sacaron a colación lo sucedido con el miembro del jurado que denunció presiones por parte de sus compañeros. 

Sin plazo límite para el veredicto

“Si los jueces prestan atención a las pruebas y los múltiples errores de los jueces en el que violaron los derechos constitucionales de mi cliente en el último juicio, deberían declarar su nulidad y ordenar uno nuevo”, afirmó Nascimento durante una comparecencia virtual ante los medios, organizada por la Asociación pablo Ibar-Juicio Justo, la organización que apoya su causa con la recogida de fondos para sustentar su costosa defensa. Actualmente tiene un presupuesto de 200.000 dólares, cubierto parcialmente con los 135.000 que en esta ronda de donaciones ha recaudado.

Para que la condena a cadena perpetua de Ibar pueda ser revocada, dos de los tres magistrados del tribunal que dirime su apelación deberían ponerse de acuerdo. No tienen un plazo límite para hacerlo. La previsión del equipo del reo español es que el veredicto tardará meses en anunciarse, quizás hasta un año. “Creo que los argumentos fueron bien y estamos en la mejor de las posiciones”, añadió Nascimento. El tiempo dirá.