El compromiso de la Unión Europea es reducir sus emisiones de gases contaminantes en un 8%. Este objetivo implica que España no puede superar más que en un 15% el nivel de emisiones. Países como Austria deben reducirlas en un 13% por debajo de las existentes en 1990, Mientras que Holanda un 6% o Gran Bretaña un 12,5%.

En lo que respecta al periodo 1990-2002, el crecimiento de la producción azulejera ha sido del 185%, mientras que el incremento de emisiones fue del 140%, siempre menos que la producción.

Actualmente existen más de 80 instalaciones de cogeneración, con una potencia total de 300 megawatios, que producen más del 80% del total de la energía eléctrica empleada por esta industria. La cogeneración contribuye significativamente a la reducción de la cifra nacional de emisiones.

El sector sólo tiene dos alternativas: reducir la producción a los niveles del año 1990 ó comprar derechos de emisiones de otros países que no cubran el cupo, lo que generará un incremento de los costes finales de venta del producto. El problema de esta última opción es que cualquier variación mínima en el precio final de las baldosas comporta una importante reducción en los niveles de exportaciones.