La Guardia Civil de Tráfico ha notado en los últimos meses un incremento de tasas cero en los controles de alcoholemia, es decir que hay más personas que no beben nada si tienen que coger el coche.

Esto implica que se está implantando en Castellón la figura del búho, aquél amigo que "esta noche no bebe" y que, normalmente, se va alternando entre la pandilla cada fin de semana a lo largo de todo el año.