El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, manifestó ayer, tras el asesinato del abogado Carlos Reverter, que "no es momento de hacer juicios y exigir cosas, pero empiezo a estar preocupado por los acontecimientos que desde hace un tiempo pasan en Castellón, cosas que antes no pasaban o eran extraordinarias". Fabra trasladó en nombre del consistorio "todo el apoyo y la solidaridad a los amigos y la familia del fallecido en estos momentos tan duros". "No creo que sea el momento para polemizar, pero me gustaría que todos pusiéramos el máximo esfuerzo para que acontecimientos como éste no formen parte de la historia de nuestra ciudad", añadió.

Por último, señaló que es más "un momento de apoyo que de polémica" y aseguró que todas las instituciones involucradas "tenemos que garantizar que estos acontecimientos no ocurran".