Diversos operadores citrícolas de Castellón han decidido apostar fuerte por el mercado chino. Tanto, que un grupo de comerciantes y de cooperativas de la provincia, liderados por la firma Nulexport, han iniciado contactos con diversas firmas marítimas para impulsar una línea directa de Castellón hasta China con barcos frigoríficos.

"Pretendemos encontrar un barco de unas 3.000 toneladas, que es prácticamente la mitad de capacidad de los que se envían a EEUU, para poder enviar clementinas a China en el plazo más corto de tiempo posible y que no se estropee la fruta. En unos 20 días podría estar allí, frente a los 10 días que cuesta llegar a EEUU", explicó a Mediterráneo¾el gerente de Nulexport, Vicent Canós.

Impulsar la iniciativa desde una agrupación empresarial y apostar por un barco frigorífico de pequeño volumen supone disminuir los riesgos frente a fletar barcos de gran volumen, en un mercado nuevo donde no se sabe cómo reaccionará el consumo ante la fruta castellonense. Sin embargo, otros interlocutores del sector ven arriesgada, incluso, esta iniciativa.

"En otras operaciones comerciales a países como son Japón y Hong Kong se ha preferido enviar contenedores sueltos, de 20.000 kilos, para tratar de pulsar el mercado, antes de llevar grandes cargamentos", explicaron desde el Soivre. Para esta segunda alternativa, se aprovechan barcos nodriza que salen de otros puertos del mar Mediterráneo, como puede ser Algeciras. DAVID GUARDIOLA